• T R A Y E C T O • [ × ShinMono.× ]

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Hitoshi creía que algo malo sobre sí mismo era su poca capacidad para notar cuando las cosas empezaban a tomar caminos ciertamente turbulentos, empezando a ir por un mal camino, realmente!

Siempre había sido de aquellos que notan las situaciones cuando ya sobre pasaban lo obvio y cruzaban la línea de lo solucionable y realmente se sentía tan desconforme con aquella parte de su personalidad, y es justamente ahora, tumbado en el amplio piso de la pequeña sala del cuarto que empieza a notar un montón de situaciones, mientras Neito está encerrado en el cuarto, vaciando sus perchas y cargando todo torpemente en una maleta.

Y no había nada realmente que pudiera hacer al respecto.

Simplemente porque el rubio estaba tan molesto, que su semblante serio y desganado colocaba una barrera para él y cualquiera que intentase hilar cualquier tipo de conversación. Por momentos se debatía si lo que el rubio sentía acaso no seria mas decepción que molestia... el sentimiento de la frustración también podría adherirse. Se levantó, caminando hasta la puerta del cuarto del rubio, aquella que se mantenía cerrada y probablemente con seguro, una mueca se formó en su rostro, recordar lo que había estado sucediendo hacia un par de semanas hacia que su pecho se sintiera pesado y su estómago se retorciera de manera desagradable...

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Neito había estado actuando de manera distante los últimos dias, Hitoshi asumió que se trataba de la época de exámenes, pensando en que si ya era algo bastante pesado para alguien como el, debería ser tres o cuatro veces peor para Neito, su estado de irritabilidad había estado a tope en aquella semanas y de repente, de un día para otro pareció calmarse por completo mientras seguía estudiando por las tardes y noches hasta finalmente concluir la totalidad de exámenes de su catedra.

Entonces Hitoshi creyó que volvería a la normalidad, molestándolo y haciendo aquellos chistes tan desagradables a los que ya estaba empezando a acostumbrarse a fuerzas, pero no. Al contrario, Neito parecía ciertamente nervioso, jugaba con sus dedos o con el borde de su manga todo el rato, se distraía entre las comidas y parecía ya no estar prestando atención a sus clases, ni siquiera se molestaba en grabarlas más... Hasta que un día simplemente empezó a saltarse sus clases.

Hitoshi había estado mudándose de salón cuando lo vio, paseando por el campus, y a pesar de que lo veía bastante de lejos podía saber que era el debido a aquella extravagancia que el chico siempre cargaba, acompañado por supuesto de su bastón, Hitoshi le había recomendado que era mejor comprarse un bastón especializado para su discapacidad pero Neito le había respondido completamente ofendido que aquellos eran feos y no tenían la mínima clase ni elegancia.

—Shinso... —Fue la voz de Todoroki quien le llamo la atención, volteando su rostro hacia el chico que vestía sus pantalones y bata blanca mientras cargaba su bolso sobre uno de sus hombros, le hizo un leve gesto con la cabeza, apuntándole hacia la figura que caminaba con tranquilidad, por aquí y allá.