"Un pequeño accidente"

Capítulo 38

Narra Ben.

No he dicho nadamas respecto a lo del beso de la otra vez, ni siquiera se lo he comentado a Jeff, más que nada por miedo a que me deje o empiece un pleito más grande de lo habitual; lo cual es lo más seguro en este caso.

Ahora me encuentro solo en mi habitación, aún no he hablado bien con Jeff despues de la pequeña pelea que tuvimos y sinceramente me estoy volviendo un poco loco... realmente lo extraño y odio que estemos peleando.

– ¿Quien es? – pregunté tras escuchar que alguien tocó la puerta.

– Soy yo ¿A quien más esperabas? ¿A tu noviecito?

Maldita sea...

Me levante rapidamente de la cama mirando hacia la puerta, él ya la había abierto y tan solo estaba bloqueando la entrada, en cuanto entró cerró la puerta detras de él.

– ¿Qué rayor quieres? A ti no te quiero ver.

– ¿Por qué actuas de esa manera? Oh, no me digas que fue por el beso de antes.- dijo de una manera burlona, acercandose a mi.

– ¡¿Tú que demonios crees?! Me besaste y sabes muy bien que tengo novio ¡No quiero que te me acerques!

Aun así el maldito se estaba acercando a mi, lo que se me ocurrió en ese momento fue tyomar una almohada y golpearlo con ella al menos para distraerlo un poco y así poder correr de allí. Lo golpr rapidameente, pero fue más rapido y la sujeto para tirar de ella y que yo callera a la cama.

– Tan infantil como siempre ¿Qué pensaste que me haría una maldita almohada?

– ¡Deja de burlarte de mi! – grité rodando para caer de la cama y gatear rapido hacia la puerta.

– ¡No te iras tan facil!

Se lanzó hacía mi para sujetarme de la pierna y jalarme hacía él, quedando sobre mi para detenerme a pesar de que trataba de forcejear. Estoy en desventaja, es más grande y fuerte que yo.

– ¡Ayudenme!

–Cierra la boca, no te haré nada... por ahora. – eso sin dudas me asustaba.– Solo vine a decirte que más te vale no decir nada al respecto sobre lo ocurrido, ni siquiera con tu noviecito. Creeme que te arrepentiras, haré que todos te odien, incluyendo Jeff. Más te lave mantener tu boca cerrada.

Sabía que eso pasaría, un chantaje... conociendo a este demente habla muy enserio, me va a joder la vida por cualquier cosa que intente.

– ¿Te quedó claro, duendecito?

– S-Si... quedó claro.

Me siento realmente inutil al estar actuando de una forma tan humillante enfrente de él, no puedo hacer nada, no puedo si quiera pensar en alguna solución al respecto. Antes de levantarse sujetó mi rostro con brusquedad para acercarme a él y besme; cuando me soltó se levantó para marcharse, no sin antes mirarme nuevamente.

– Maldito... lo odio enserio. ¡Agh! ¡¿Por qué rayos no hice nada para poder defenderme?!

Estaba muy frustrado, jamas lo había podido encarar así como Jeff lo hacía, ni siquiera sabia porque enfrente de él la mayor parte del tiempo me siento tan impotente, es realmente patetico... yo soy patetico.

°

Ya había pasado una semana desde la advertencia de Dark Link, algunas veces me llegaba a molestar cuando estaba solo, por suerte no pasaba de los besos, aunque claro que no era como si eso me gustara, tan solo me aliviaba que fuera así. Las cosas con Jeff estaban mejor, habíamos logrado resolver el tan absurdo problema, aunque más que nada me pareció lindo que él se disculpara.