Capitulo 52

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Narra Jeff

– ¡Yo puedo con esto! - grité intentando levantarme de la silla de ruedas.

– Tienes que ir más despacio, doctor Smiler dijo que no podías ir tan rápido en esto.

Dijo Ben muy preocupado, dejándome en la silla de nuevo.

Personalmente odio parecer débil, el sentirme tan vulnerable me molesta muchísimo, siento que en cualquier momento decaeré o que alguien podría matarme. Además no quiero ser una carga para Ben.

– Yo... puedo hacerlo. Solo necesito levantarme de esta puta silla ¡Así que no me detengas! - dije para intentarlo de nuevo.

Y justo cuando creí que iba a levantarme finalmente de aquella endemoniada silla, volví a caer, solo que no sobre la silla sino que de frente, lastimándome la herida del estómago.

– ¡¡Agh mierda!! - grite de dolor.

– ¡¡Jeff!!

Se apresuró a levantarme del suelo, dolía horrible, pero vaya que al menos logre moverme... tan solo un poco. Smile estaba ahí, ladrando y moviéndose inquieto porque le había caído, se ha preocupado por mi.

Una vez que me levantó del suelo y me ayudó a sentarme en la silla me reviso con cuidado.

– ¿Estas bien Jeff?

– Estoy bien... joder no te pongas a llorar. - tenia sus ojos vidriosos, mirándome con un leve puchero.- Mira me ... estoy en una sola pieza.

Suspiro aliviado, mirando me aun.

– L-Lo siento... me altere un poco.

– Oye está bien, lamento ponerte así... es que rayos. Detesto sentirme tan malditamente vulnerable. Me asusta quedarme así.

– ¿Por qué? No te pueden hacer nada estando aquí. Además, yo estoy contigo.

– Ya lo se... es solo que jamás me gusto esta sensación. Además creo que te estoy ocasionando demasiados problemas.

– Para nada. Como tú novio es mi deber ayudarte, además mira cómo estás, me gusta cuidarte.

– No se que hice para merecerte enano...

Lo tiré para que quedara sentado sobre mi, de esa manera pude atraerlo un poco hacia mi y darle un tierno beso en los labios, cosa que lo hizo feliz ya que me correspondió al beso.

– No eres malo, solo eres alguien incomprendido.

– Solo lo dices para que no me sienta mal.

– Claro que no, no lo digo por lástima o algo por el estilo. Yo creo que es así.

– En verdad que eres un maldito ángel, no sé qué rayos hice para merecerte enserio. - Sin más lo llene con besos.

– Jejeje, m-me haces cosquillas.

– Ya lo se, es tan divertido. - Smile comenzó a ladrar y mover su cola, acercándose para subir sus patas sobre nosotros.- También tú eres muy bonito.

Lo abrace más y a Smile lo acaricie con una mano, hasta que amos escuchamos un rayo muy fuerte, el cielo estaba muy nublado, pronto comenzaría a llover.

– Carajo, y nosotros aquí afuera, intentando caminar. Vámonos, nos caerá un rayo.

– Quizás a ti, jeje.

– No juegues con eso enano, no es tan divertido que un rayo te caiga encima.

Siempre que vamos a intentar que camine nos venimos al patio, no quiero que ningún idiota me vea de esta forma. Comenzaron a caer pequeñas gotas, y el aire era muy frío.

"Un pequeño accidente" Donde viven las historias. Descúbrelo ahora