vendas y diarios

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La mansión estaba silenciosa y aparentemente desierta cuando llegaron, Harry reprimió un escalofrío ante el frío ambiente. Los ojos oscuros de Severus lo observaban, la mirada de obsidiana hacía que Harry se sintiera nervioso y aprensivo. El lugar tenía un aire tenso y melancólico, muy diferente a lo que había parecido antes. La profunda voz de Severus, que parecía leerle la mente, penetró en la penumbra.

"No ha salido de su habitación desde la noche en que huiste". A Harry le dolió el corazón al darse cuenta de que Lucius había sufrido lo mismo, el dolor de estar separados le había pasado factura.

"Lo siento". Harry susurró y esperó a ser reprendido por el maestro de pociones, aturdido cuando fue arrastrado a un suave abrazo. La voz de Severus sonaba tranquila y suave, tan diferente a su fachada normal.

"Nosotros deberíamos ser los arrepentidos", apretó un beso en la frente de Harry y éste tuvo que luchar contra las lágrimas ante el tierno gesto, "Deberíamos haber sido sinceros contigo desde el principio... fui innecesariamente duro contigo... porque..."

"¿Por mi padre?" Harry terminó la frase por él, apretando los brazos alrededor del cuello del hombre e inclinándose para rozar sus labios con los finos de Severus. La respuesta de Severus quedó amortiguada por el lento beso que se intercambió. El momento se rompió por un suave carraspeo de alguien, Harry abrió sus dichosos ojos cerrados para mirar a Draco, pálido y de aspecto ansioso mientras estaba en la puerta.

"Pott... Harry", Draco parecía nervioso y arrastraba los pies, "Me alegro de que hayas vuelto", miró a Severus como si quisiera confirmar su teoría, Severus asintió y dejó escapar una exhalación aliviada, "Mira Harry, siento lo que dije... no debí hacerlo". Harry levantó la mano, tomando todo el control para aceptar las disculpas del rubio.

"Mira Draco...olvídalo". Podía sentir que cada parte de su cuerpo se tensaba y Severus le acarició el antebrazo para calmarlo, el efecto fue instantáneo. La sensación tranquilizadora de los ágiles dedos de Severus ayudó a frenar el temperamento de Harry, pero no hizo nada por la excitación que de repente se hizo notar. El alivio brilló en los ojos grises de Draco y éste se desplomó, la carga emocional evidente en los hombros caídos.

"Ve con él... necesita verte". El tono de Draco era tenso y silencioso.

Harry vio la preocupación e inmediatamente corrió por los largos pasillos hasta el dormitorio principal. La habitación estaba débilmente iluminada y la sensación de presentimiento llenaba el corazón de Harry.

"¿Lucius?" susurró Harry, la luz le impedía ver al rubio tumbado en la cama. Con el corazón en vilo al no recibir respuesta, acercándose a la cama y percibiendo a Severus de pie junto a la puerta en lugar de ver al hombre, sus ojos se centraron en el cuerpo inmóvil en la cama.

"Harry". Un sollozo roto resonó en la habitación y Harry se lanzó sobre la cama. Lucius yacía pálido, con el cabello sedoso y suave y su cuerpo temblaba mientras miraba a Harry. Pensamientos confusos pasaron por la mente de Harry mientras miraba al hombre, con los ojos grises llenos de lágrimas.

"Oh, Lucius". Harry sollozó y se arrojó a los brazos de su apuesto amante. Ambos lloraban de alegría por estar juntos de nuevo, Lucius murmuraba sinceras palabras de disculpa y Harry reflejaba el sentimiento en sus propios cariños murmurados. Severus se mantuvo en la periferia de los hombres, sus ojos oscuros observando el reencuentro sin decir una palabra, Harry y Lucius levantaron sus manos hacia él. Por un momento pareció que el hombre de ojos oscuros se quedaba congelado en el sitio como si no supiera qué decir. Harry se inclinó más hacia delante pero mantuvo una mano en el pecho de Lucius, necesitando mantener el contacto con la piel del hombre.

"Severus....por favor". La voz de Harry contenía un matiz de necesidad y los ojos de Severus se encendieron de deseo mientras se acercaba a los dos hombres. Harry se volvió hacia el ahora sonriente Lucius y presionó un beso en sus exuberantes labios, el rubio gimió al contacto.

Mentes Alteradas (TRADUCCIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora