Capítulo 17

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Los días seguían siendo lo más rutinarios posibles para que Taehyung tenga más facilidad de recordarlo.
Habían días buenos, y habían días muy malos, pero todos superables.

Medicamentos, desayuno, Jungkookie, escuela, casa de Jungkookie o de la señora Kim, tarea, tardes de besos, abrazos y/o películas, dormir con Jungkook, cantar y lo mismo todos los días sin falta.

A pesar de ser tan rutinario, Jungkook y Taehyung lo disfrutaban como nada en esta vida, como si todos los días hicieran algo nuevo. Jungkook amaba ver los ojos de Taehyung al saber que iba a ser un día emocionante.

Aprender a lidiar con Taehyung y la manera tan repentina en la que olvida su relación con Jungkook, pero, jamás olvida a Jungkook.

Era difícil, pero recordarlo le hacía a Kookie tenerle fe y amor cada día.

Hoy tenían otro examen importante para ingresar a una Beca que podría ayudarles a tener un buen trabajo a futuro cuando concluyeran sus estudios.
Jungkook repasaba todos los días con Tae un tema a la vez para no abrumarlo.

Aún con las bajas posibilidades de vida que el médico les dio, Jungkook y la madre de Taehyung veían un futuro para él a pesar de cualquier diagnóstico médico. Eso los reconfortaba un poco.

-Vamos Kookie, perderemos ese examen.-Dijo el castaño corriendo hacia el coche de Jungkook.

-Tranquilo Taehyungnie, llegaremos antes de la hora, confía en tu novio.-Dijo el pelinegro tomando la mochila del menor y dirigiéndose hacia él para conducir.

-Pero de todas formas, se puede acabar la gasolina, o podemos encontrarnos en el camino con unos niños que hacen fila para pasar en el camino, o se puede ponchar una llanta, o puede comenzar a...-Taehyung fue interrumpido por el beso que Jungkook colocó en sus labios de manera inesperada.

El vaivén de los movimientos y la combinación de saliva que ambos cursaban, hacia sonreír a ambos.

-Llegaremos a tiempo cariño, confía en mí.-Dijo Jungkook juntando su frente con la del menor quien asintió de inmediato y subió al coche.

En el camino venían tarareando todos los temas que estudiaron para recordarlos fácilmente.

El camino se hizo pequeño, Jungkook bajó del coche y le abrió la puerta al menor quien se encontraba concentrado en los temas que tarareaba en su cabeza.

-Taehyungnie, me apuras para llegar puntual y te atrasas aquí.-Jungkook sonrió tomando su mochila y la del menor.

-Perdón Jungkookie, vamos.-Colocó una enorme sonrisa en su rostro y se dirigió a su salón de clases.

Cada uno fue al lugar que le correspondía.
A Jungkook en el salón A y a Taehyung en el F, algo lejos, pero solo por el examen.

-Te deseo éxito mi amor.-Jungkook dejó un beso suave en las comisuras de Taehyung.

-Jungkookie, te amo.-Fue su manera de desearle suerte igual al mayor.

Se dirigieron a su salones correspondientes y las pruebas comenzaron a medida que los profesores iban llegando.

Esta prueba es una de las más importantes de su escuela. Prueba de 300 preguntas que les aseguraba no solo un buen futuro, sino también, un trabajo soñado con relación a lo que estudien, con posibilidad de viajar a cualquier país para ejercerlo.

Taehyung amaba la idea de viajar por el mundo junto a Jungkook y su mamá, así que esto era importante para él tanto como para Jungkook.

Las manesillas del reloj iban rápidas.

Pregunta 1. Respondida, que fácil.
Pregunta 3. Lista.
Pregunta 10. Algo complicada, pero ni tanto.
Pregunta 18. Ok.
Pregunta 35. Bueno, era obvio.
Pregunta 56. Lo tengo en la punta de la lengua, pero no la recuerdo.
Pregunta 60. Creo que es la A, o tal vez la B.
Pregunta 65. No la recuerdo.
Pregunta 78. No entiendo este tema.
Pregunta 80. ...

El silencio aturdiendo la mente de Taehyung empezó a sofocarle. No entendía por qué estaba en un salón de clases y el por qué todos estaban tan callados.

-¡JUNGKOOK! QUIERO A MI JUNGKOOKIE.-El menor comenzó a gritar sin motivo alguno tirando todo al suelo.

Sus compañeros estaban paniqueados y aterrados por su comportamiento.

-Taehyung, basta.-Le regañó su maestra.

-JUNGKOOK, YO NECESITO A JUNGKOOK, NO PUEDO HACER ESTO SIN ÉL.-Se tiró al suelo de inmediato de forma fecal tapando sus ojos llenos de lágrimas con ambas manos.

-KIM TAEHYUNG. BASTA, ESTÁS FUERA DEL EXAMEN.-La maestra no comprendía.

-Maestra, por favor, espere, no le grite, lo altera más.-Nayeon corrió hacia él para intentar calmarlo pero este no escuchaba.

-DÉJAME, DÉJAME. POR FAVOR, SOLO QUIERO A JUNGKOOKIE. NECESITO A MI KOOKIE.-Gritaba sin parar.

-Está bien, está bien pequeño. Iré por él, ¿De acuerdo? Tranquilo. -Le decía Nayeon mientras mantenía su distancia y su calma.

Taehyung pareció entender y calmarse un poco en lo que Nayeon regresaba. Su mirada no se apartada de la puerta, no tenía en cuenta a los demás del salón que lo miraban raro y murmuraban sobre él.
Solo quería ver a Jungkook entrar.

Unos minutos pasaron. Y lo que anhelaba llegó.

-¡Taehyungnie!-Jungkook se agachó al suelo para abrazarlo y el menor no dudó en hacer lo mismo.

-Jungkookie, de repente estaba en casa y luego de un momento a otro, estaba aquí. Me asusté mucho, no entiendo, no entiendo, no entiendo, no entiendo.

-Mi amor, tranquilo, todo está bien, aquí estoy, ¿Sí? Calma cielo.-Jungkook lo ayudó a levantarse y lo sacó del salón. Lo dejó en la puerta un momento en lo que iba por las cosas de Tae.

-¿Él, se encuentra bien Jungkook?-Preguntó la maestra algo asustada.

-S-si, maestra, por favor, discúlpelo. Taehyung está enfermo, olvida las cosas, y esto se va agravando poco a poco. Por favor. Comprenda, no puedo explicarle ahora a detalle, pero la señora Kim se encargará de explicarle luego. -Mencionaba mientras tomaba la mochila del menor con fuerza.

-N-no sabía, no te preocupes, por favor, lleguen con cuidado.-La maestra le dio unas palmadas al menor y este asintió y se retiró del salón para ir con el menor quien estaba mirándolo con miedo aún.

Taehyung, no me olvides. (TAEKOOK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora