【Capítulo 17】

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Luego de que aquellos dos enamorados se quedaran dormidos, sus amigos entraron para poder hablar, sorprendiéndose al encontrarlos dormidos.

No era sorpresa para ellos verlos dormir juntos, así que no pensaron que hubiera algún cambio- cosa que decepciono un poco a todos-.

No estuvieron mucho tiempo, luego de unos 15 minutos las visitas decidieron irse.

–Con permiso- una enfermera ingreso a la habitación para checar a la paciente que había despertado- Oh- pero se sorprendió al verla durmiendo junto al rubio.

Sin hacer mucho se retiro diciendo que vendría luego, Draken rio ante aquello y se recostó en su camilla con sus brazos detrás de su cabeza.

–¿Y ustedes dos cuando serán una pareja?- les pregunto mirándonos de reojo.

Sin obtener respuesta, empezó a dormir.

Sin enterarse que aquellos dos.

Ya habían dado el siguiente paso.

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–¿Así que podrán retirarse mañana?- pregunto Hana, quien conversaba con la enfermera fuera de la puerta, viendo de reojo como su nieta comía alegremente unos dulces mientras el Sano la observaba.

–Si, no se preocupe Tanaka-San, Natsuki-Chan es alguien muy fuerte. Se recuperó enseguida.

Fue una gran coincidencia al enterarse que aquel hospital donde Ken y Natsuki habían sido atendidos, era el mismo en el cual estaba internada la abuela de la Sumiyoshi.

–Ya, muchas gracias- la enfermera se retiro, para que la de cabello plateado pudiera ir a ver a su querida nieta- ¿Qué crees que estaba haciendo metida en tal conflicto?- la regaño mientras le tiraba la oreja.

–¡O-Obaa-San!- grito en queja- Se habían metido con mis amigos, ¡no podía dejarlos así!

–Siempre haz sido muy preocupada por tus amigos- suspiro acariciando su cabeza- Pero si vas a hacer eso, debes de tener cuidado. Se que eres muy fuerte Natsuki, pero aun así...

–Fueron mis dolores de cabeza.

–¿Qué?- preguntaron los tres a la vez al escucharla decir aquello.

–Mis dolores de cabeza habían vuelto- volvió a decir- Y no solo eso, también varios recuerdo que no quería que aparecieran- apretó las sabanas- Pero creo que ya me siento mejor, luego de dormir una semana. Me siento renovada- sonrió infantilmente.

–Suki...

–No te preocupes, Jiro-Chan. No es nada del otro mundo- giro su vista al periódico que traía la mayor y se sorprendió al leer su apellido en él- Obaa-San, ¿me lo prestas?

–Claro, ten.

Sus ojos recorrieron las primeras hojas, cambiando su feliz expresión a una neutra.

Después de todo esto, no quiero que ellos se metan en mi vida- pensó algo sería, había leído que su primo había sido adoptado por sus padres y ellos habían tenido otro hijo, que debería de tener la edad de 12 años. Sonrío irónica- Tengo un hermano.

–¿Qué?- le pregunto sorprendida la abuela.

–Sumiyoshi Kenji, el segundo hijo de la famosa familia Sumiyoshi. A tan solo sus 12 años de edad ya es todo un genio al cual hay que temer- leyó tranquilamente- Su hermano mayor Sumiyoshi Ichiro, futura cabeza de los Yakuza Sumiyoshi se ve bastante feliz por lo que pudimos captar en cámaras- río un poco ante de dejar la gran hoja de  papel a un lado y seguir comiendo tranquilamente- ¿Qué?- pregunto al sentir el pesado ambiente.

–¿Estás bien?- le pregunto Mikey agarrando su mano.

–Sip- respondió simple- Perdí el afecto hacia esas personas hace mucho tiempo ya y sinceramente no me hubiera gustado estar presa ante tanta responsabilidad. Las Yakuza ya es otro nivel y administrar todo seria agotador.

–Me alegra que estés bien- dijo la anciana levantándose.

–¿Obaa-San?

–Me iré yendo ya, es hora de mi sienta- empezó a retirarse- Te veré mañana, querida.

–Adiós- se despidió agitando su mano- Aunque me sorprende que los periodistas pudieran hacer una entrevista.

–¿Por qué?

–Son Yakuza's- le dijo obvia- Y una banda de criminales bastante temida en todo Japón, debio haber sido ese hombre alto con lentes que iba a esa casa para saber como iban las cosas- suspiro- Recuerdo que les gustaba presumir de sobremanera sus logros.

–Natsuki- la llamo Draken- ¿Quién es Ichiro? Desde aquí parece mayor y no nos habías contado de que tuvieras un hermano mayor.

–Era mi primo- mordió su comida- Por lo que recuerdo, cuando el tenia 5 sus padres murieron en una de sus misiones o algo así, así que empezó a vivir conmigo. En ese entonces tenia 3 años, aunque apenas convivimos unos meses- alzo sus brazos- Me alegro que se encuentre mejor, solía escucharlo llorar todos los días.

–Hump.

Pero Mikey siguió en silencio, estaba enojado por el hecho de que aquellas personas hubieran desechado alguien tan increíble y valioso.

Simplemente no los comprendía.

–Están locos.

–¿Eh?

–No es nada- sonrió antes de acariciar su cabello- Solo... disfruta de tu comida.

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Gracias por leer^^

Lo admito no es de mis mejores capítulos, pero espero que haya sido de su agrado♡

❀ 𝒜 𝓉𝓇𝒶𝓋ℯ́𝓈 𝒹ℯ𝓁 𝓉𝒾ℯ𝓂𝓅ℴ  ❀ 𝚂𝚊𝚗𝚘 𝙼𝚊𝚗𝚓𝚒𝚛𝚘×𝙾c ❀【ᶠⁱⁿᵃˡⁱᶻᵃᵈᵃ】 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora