【Capítulo 25】

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–¡Aun así...!- grito Takemichi luego de escuchar la historia que relato Baji-¿¡Cómo crees que se sentirá Miyo-San!? ¡Es tú amiga, ¿no?! Por lo que he visto, te 8importa incluso más que Mikey-Kun- frunció el ceño, pero se alzo rápidamente al ver al chico de cabello de dos colore a centímetros de él.

–"¿Miyo-San...?"- dijo con sus ojos abiertos- Natsuki... ¿sigue con ellos? ¿Con él?

–S-Si...- respondió dando un paso atrás.

–Baji, no mencionaste que Natsuki siguiera en ToMan- miro al de largas hebras negras.

–No recuerdo que me hayas preguntado, ¿o si?- sonrió burlonamente- Además, creí que seria obvio que seguiría junto a Mikey.

–Hay que salvar a Natsuki- le dijo- Si sigue con Mikey, solo se llenara de problemas y le pasara lo mismo que a mi.

Problemas...- miro de una manera rara al Hanemiya- Pero... si Mikey-Kun y Miyo-San se complementan más que nada...

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–¿Hm?- una silueta llamo la atención de la chica, que detuvo su andar para ver de quien se trataba.

Grata fue su sorpresa al no encontrarse a nadie, entre cerro los ojos y decidió volver por donde venía. Si quería cumplir su promesa de no meterse en ninguna pelea, lo mejor seria no seguir su intuición ahora. Aunque esta le dijese a gritos que no se fuera.

–Mmm... ya es algo tarde- susurro mirando el cielo- Si no vuelvo, Jiro-Chan se enojara- ignoro aquella sensación y siguió caminando- Pasare a comprar dorayakis, puede que así no se enoje tanto. Oh, y unos pockys para mi- detuve su paso y miro el anterior caminó que iba a seguir- Pero no se porque, algo me dice que Takemichi esta detrás de esto- entrecerró los ojos nuevamente- Mhp...

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Tadaima- susurró, entrando a la habitación del Sano, la cual se encontraba separada de la casa principal.

Sonrió nerviosa al verlo con sus piernas y brazos cruzados, esperándola. Tenia una expresión de pocos amigos, la cual cambio al ver la bolsa de Tokoyakis en la mano de la femenina.

–¡Suki!- grito feliz para abrazarla- ¿Sabes que eres la mejor?

Ella sonrió sonrojada, sintiendo como su mascarilla era quitada de donde debería y algo más se posicionaba en sus labios, haciéndola enrojecer más de ll que estaba.

Al separarse sintió como era abrazada con fuerza.

–¿J-Jiro-Chan...?

–Esta es la quinta vez que puedo probar tus labios...- susurró- Pero aun así... No puedo dejar de hacerlo y avergonzarme luego...

–...- sus cuerdas vocales no la dejaban hablar, estaba tan nerviosa que incluso llego a botar la caja de sus queridos pockys.

–He estado esperando tanto por esto...- acuno su rostro, viendo como aquellos ojos rojos que tanto amaba trataban de esquivar su mirada, pero él seguía buscándola- Que sinceramente no puedo describir como me siento al respecto...- al fin pudo encontrarla y sonrío ante sus sonrojadas mejillas.

–¿D-Desde cuando... has sentido esto... por mi?- pregunto avergonzada, viendo como las mejillas del rubio se prendían como dos faroles- ¿Jiro-Chan...?

Vio como el avergonzado Manjiro se alejaba de ella mientras ocultaba su rostro detrás de su mano.

–¡O-Oye...!

–En otro momento- le dijo acostándose en su cama, dándole la espalda- Me dio algo de sueño, iré a dormir- soltó nervioso- Me alegra que hayas llegado bien, oyasumi.

–¡Aun son las 6 de la tarde...!- pronto escucho sus ronquidos, sin saber si eran falsos o de verdad- ¡Jiro-Chan...!- como una niña pequeña junto sus brazos.

Pero luego sonrió dejando ir un resoplido, iba a irse a dormir en aquel sillón donde Mikey la esperaba.

Pero su cintura fue envuelta por brazos ajenos, obligándola a acostarse a un lado del rubio quien se escondió en el cuello de ella.

Oyasumi, Jiro-Chan.

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Gracias por leer^^
(* ^ ω ^)

❀ 𝒜 𝓉𝓇𝒶𝓋ℯ́𝓈 𝒹ℯ𝓁 𝓉𝒾ℯ𝓂𝓅ℴ  ❀ 𝚂𝚊𝚗𝚘 𝙼𝚊𝚗𝚓𝚒𝚛𝚘×𝙾c ❀【ᶠⁱⁿᵃˡⁱᶻᵃᵈᵃ】 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora