50 Sombras de Nicklaus. Adicto a mi sumisa.

El comienzo de un error...

¿Alguna vez os habeis sentido contrariadas por vosotras mismas? Asi me sentia yo, dividida en dos. Si... era copciente de lo que debia hacer. Pero me reusaba a aceptarlo. Sabia que acabaria asi, rota en mil pedazos. Y aun sabiendolo y habiendolo vivido, siempre regresaba a sus brazos. No logro comprender cual es el vinculo que hay entre nosotros dos, ni porque. Solo se que debo irme lo mas lejos posible, es la unica manera que encuentro a mi alcance para finalizar esta situacion. Me gustaria quedarme, poder mirarlo y tan solo decirle que se acabo. Pero, no. No tengo el valor suficiente para enfrontar este sentimiento que recorre todo mi ser. Se que no podria resistirme a la tentacion que son sus labios y acabaria volviendo a engañarme otra vez. Por lo que solo me queda una opcion. Huir.

Hace 6 meses...

-Mama... Estas siendo un poco exagerada. -Digo mientras le sonrio con ternura.

-Puede, pero como dice el dicho. Mas vale prevenir que curar. -Dice en un tono serio.

-Es solo una fiesta, no me pasara nada. Todas mis amigas estaran alli. Martha, Ashley, Juliet... Y, Tom.  

-Mmm... -Murmura pensativa. ¿Tom estara alli? ¿Estas segura? -Asiento. Es un buen chico... Esta bien, puedes ir.

-¡Gracias, Mama! -Le digo entusiasmada como una niña pequeña, mientras la abrazo.

-Relajate señorita. Recuerda que tan solo vas porque el asistira. Y estoy segura que si el esta, no permitira que nada te pase. -Me dice mientras me acaricia mi mejilla con ternura. 

Por fin logre convencerla. ¡Que emocion! Llevaba muchisimo tiempo preparandolo todo. Mi peinado, mi vestido... Hubiera sido un horror no haber podido asistir, despues de haberme estado calentando tanto la cabeza. -Para terminar de convencerme con mi nuevo look, me miro al espejo. ¡Estoy perfecta! A mi no me suele importar mi apariencia fisica, tan extremadamente. Pero hoy... ¡Hoy estara Tom! Y no puedo evitar querer impresionarle. -Me apresuro, cojo mi mini bolso y salgo de casa.

Al llegar me encuentro con una casa destrozada, llena de botellas de alcohl por el cesped, gente drogandose y descontrolada, y con otros muchos detalles desagrables que no sabria muy bien como describir. Al fondo de la casa se puede escuchar una musica tan fuerte que me causa bastante impesion, de repente, Martha sale corriendo hacia fuera de la casa. Lleva una cerveza en la mano y un chico la esta persiguiendo. Ella sonrie, mostrando cierto agrado a ese jueguecito. -Me aproximo hacia ella.

-¿Que es todo esto? -Pregunto impactada.

-Diversion, Coraline, algo que a ti te falta desde hace mucho tiempo. -Dice mientras le sonrie con malicia al chico que se encuentra a su lado, al mismo tiempo en el que se muerde el labio inferior.

-¿Quien es el? -Pregunto mientras suelto una mirada despectiva hacia aquel chico.

-Se llama Adam, y es el amor de mi vida. -Dice obviamente, borracha mientras lo besa con pasion.

-Definitivamente esta no es la fiesta que me describiste. -Me quedo sin palabras por unos instantes. Adios. -Martha me agarra del brazo.

-No te vayas. Mira, siento haberte mentido. Pero, seamos sinceras. ¿Si te hubiera dicho la verdad hubieras venido? -Mantengo silencio. Obviamente, no estarias aqui. Y yo queria que vinieras. ¡Joder, Coraline! ¿Ya no te acuerdas lo bien que lo pasabamos cuando nos conocimos? Queria recordar viejos tiempos. 

-No se que decirte, Martha. -La miro fijamente, mientras recuerdo todos esos momentos. 

Ella me esta mirando con <<ojitos de cachorrito>> y yo no puedo resistirme a esa mirada, y menos cuando se trata de mi mejor amiga.