Qué sucedería si estuvieras forzado repetir la vida una y otra vez, ¿Que se supone que puedes hacer cuando estás tan cansado de vivir? Todo es tan repetitivo que solo quieres acabar con todo.
Pero sabes que si lo intentas de todas formas no importar...
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— Uraraka-San.— Habló Izuku mientras me cargaba camino al comedor, haciendo que los chicos nos miraran extraño, aunque a él no parecía molestarle.
— ¿Sí?—
— ¿Por qué decidiste venir a la U.A y ser un héroe profesional?— Ante la pregunta ella pareció ponerse un poco tensa.
— ¿Eh? Esto... Porque...— Empezó a enredarse con sus palabras y luego dijo su motivo en voz baja.
— ¡¿Por dinero?! ¿Quieres ser un héroe por dinero?— Izuku e Iida se veían sorprendidos y yo solo reí en vos baja.
— Poniéndolo simple, sí...— Ella se rasco el cuello avergonzada.
— Lo siento, no es una sana razón... Ustedes tienen motivaciones admirables, así que es embarazoso...—
— Nah, no te avergüences, yo también lo haría por dinero, viendo la paga que dan, quien no.— Dije y frote mi mejilla en el cuello de Izuku, dándole un escalofrió.
— ¡¿____-San?!— Izuku e Iida me miraron sorprendidos.
— ¿Que? Pagan bien.—
— Pero... Mi familia tiene una compañía de construcción, pero no hemos obtenido un trabajo, así que estamos en la ruina.— Comenzó a explicar Uraraka, ignorando lo anterior.
— Aunque, no es algo que deba decirle a otras personas...— Luego de eso, Uraraka nos contó que quiso trabajar para sus padres, pero ellos se negaron con tal de dejarla cumplir sus sueños.
Esos son buenos padres, a pesar de sus dificultades siguen poniendo la felicidad de su hija primero, y ella quiere devolvérselos ahora.
— Definitivamente me convertiré en un héroe, y permitiré que mi familia viva tranquilamente.— Ella nos miró con determinación y un pequeño silencio se hizo presente, hasta que Iida lo interrumpió, comenzando a aplaudir.
— ¡Bravo! ¡Uraraka-Kun! ¡Bravo!— Él siguió aplaudiendo, llamando la atención de las personas en el pasillo y yo solo sonreír.
Así hasta que All Might interrumpió el momento, entrando dramáticamente.
— ¡Encontré al joven Midoriya!— Grito mientras apuntaba a Izuku, el cual casi me vota de la sorpresa.
— ¿All Might? ¿Qué sucede?— Preguntó y él se quedó en silencio por unos momentos.
— ¡Almuerzo! ¿Quieres comer conmigo?— Dijo sacando un bento celeste con conejitos.
— ¿Qué tal?— Preguntó e Izuku miró a Iida en busca de una respuesta, a lo que él sólo le asintió.
— Enseguida.— Comenzó a caminar, pero por lo visto recordó que aún me estaba cargando.
Él comenzó a buscar un lugar para dejarme y estuvo a punto de dejarme en los brazos de Iida, pero All Might lo detuvo.
