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No era una mañana con cualquier otra, hoy llegarían a Wave, según los cálculos de Mingi y Hongjoong estarían en la isla justo en la tarde, todos en el barco estaban ansiosos, emocionados pero también con un poco de miedo. Pero el más afectado era San, toda la semana estuvo inquieto, perdido en sus pensamientos y ahora no era la excepción.
El pelinegro estaba en su camarote, no había salido ni para desayunar, así que eso preocupó demasiado a Wooyoung, el Tritón en ese momento se dirigía hacia la habitación para hablar con su pareja, quería transmitirle tranquilidad. Cuando abrió la puerta lo primero que vio fue a San acostado en la cama con la vista fija y pérdida en el techo de madera.
—San... —cerró la puerta, pero no hubo respuesta por parte del mayor, así que se subió a la cama, rodeando con uno de sus brazos el cuerpo de San.
El pirata al sentir el contacto salió de sus pensamientos para girar su cabeza y toparse con una melena rosada, dio una sonrisa ladina y dejó un beso en la coronilla de su Wooyoung.
—Hola caramelito, perdón, no te escuche entrar... —aferró su brazo en la cintura del menor.
— ¿En qué tanto piensas? —
—Falta poco para llegar a Wave, estoy nervioso y preocupado... —
—Todo saldrá bien, llegaremos a Thanxx sanos y salvos. —se removió girando su cuerpo y viendo fijamente el rostro de San.
—Sí, todo saldrá bien... —
—Estoy emocionado por conocer tu hogar... —
—Es un lugar bonito, ahí tendrás la playa completa para que puedas nadar con libertad, la gente es buena... —sus dedos se enredaban en los cabellos rosas del Tritón a la vez que dejaba caricias. —Aun no me creo que vendrás conmigo. —
—No me quiero separar de ti, a tu lado soy feliz, quiero estar contigo por el resto de mi vida. —
—Mi caramelito hermoso. —se inclinó dejando un casto beso en los labios rojitos del menor. —Te amo... —
—Cada vez que dices que me amas mi corazón se siente cálido. —Sonrió con notable alegría. —Yo también te amo, mi lindo pirata. —
Por el resto de la mañana no salieron de la habitación, se mantuvieron abrazados hablando sobre ellos, sonriendo, regalándose caricias y besos, olvidando por ese momento todas sus preocupaciones, disfrutando del tiempo juntos.
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