cuento 6

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Cuento (1 solo capítulo)

Entrenamiento

Conocí a Jungkook durante las vacaciones de verano.

Mis padres me obligaron a ir con ellos a una playa poco concurrida, yo no quería ir pues tenía planes con mi novia de ir a otro lugar ése verano, cuando mi novia supo que los planes se habían ido al carajo, hizo un berrinche y finalmente terminó conmigo.

El viaje fue tedioso y aburrido, mis padres optaron por ignorarme y yo a ellos.

Cuando llegamos me encerré en mi pieza dispuesto a no salir de ella hasta el término de dichas vacaciones, pero el calor era insoportable, así que me puse unos shorts y una polera suelta y salí a recorrer el lugar.

No me había equivocado, el lugar apestaba, nada más que lugareños y uno que otro turista, en general familias con hijos pequeños, ¿quién de mi edad querría estar allí?.

Me senté en la costanera a mirar el océano y fue ahí que lo vi por primera vez.

Un chico de pelo negro y rebelde que le caía desordenadamente por el rostro, vestía un pantalón de buzo ancho polera dos tallas más grande que su cuerpo y zapatillas de caña alta y desabrochadas.

El chico traía una patineta la que tiró al suelo y comenzó a deslizarse agarrando velocidad, el chico realmente lo hacía bien, cuando pasó por mi lado me dio una breve mirada y pasó de largo, yo lo miré hasta que se perdió.

Luego de un rato me pare y me dirigí nuevamente a la casa que mis padres habían alquilado.

Por la noche mis padres se pusieron a ver una película y yo les avisé que iría a dar una vuelta por ahí.

Llegué a un lugar cercano a la costanera donde había una feria, decidí echar un vistazo para matar el tiempo.
De repente en una de las tiendas vi al chico de la costanera lanzando dardos y me acerqué, el chico daba una y otra vez en el blanco, ¿había algo que no pudiera hacer? me pregunté.

El chico volteó y me vio.

- Hola- le dije yo.

- Ho- hola- me respondió sorprendido.

- Me llamo Jimin¿ y tú?- seguí preguntando.

- Jungkook- no agregó nada más.

- Te vi en la costanera, eres bueno con la patineta- le dije sonriendo.

- Mmm!... un poco. - contestó poniéndose un poco rojo, cosa que a mi me pareció tierna.

-¿Oye te importaría si mañana te acompaño en mis patines mientras tu andas en tú patineta?.

Jungkook se rascó la oreja y encogió los hombros.

- No tengo problema, si tú quieres.- me respondió.

- ¡Ok!, nos vemos mañana entonces- le hice adiós con mi mano y me fui más contento que cuando había llegado.

Desde ese día nos hicimos grandes amigos, Jungkook era bastante tímido pero poco a poco fue tomando confianza y la convivencia entre nosotros se hizo natural, era como si nos conociéramos de toda la vida.

Los padres de Jungkook se hicieron amigos de mis padres así que el verano transcurrió bastante más entretenido de lo que había esperado.

Jungkook también vivía en Busan, él era dos años menor que yo, ese año entraría a la universidad, yo cursaba segundo año de danza contemporánea, él entraría a estudiar artes modernas, así que probablemente nos veríamos.

Cuando el verano terminó nos despedimos, debo confesar que sentía cierta tristeza por dejar de verlo.

El último día estábamos sentados en la costanera mirando el océano.

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