🏹Tɑɾget🏹-《Vhope》

Target II

Jin perezosamente fue abriendo los ojos, anhelando que los pocos rayos que ingresaban por la ventana desaparecieran para dejarlo dormir más, intentó cubrirse nuevamente con su confortable manta, hasta que los recuerdos de la noche anterior lo alertaron dejando el sueño de lado, se levantó bruscamente ocasionando un dolor agudo en su espalda que lo hizo gruñir y maldecir en voz baja.

- Jinnie, por fin despertaste - hablo Hoseok ingresando al dormitorio, en sus manos llevaba una bandeja que contenía desayuno y pastillas para el dolor - Discúlpame por todo lo que pasó ayer, si tan solo te hubiera escuchado no estuvieras herido y...

- Shhh, hey no te preocupes pequeño estoy bien ¿cierto? - tranquilizó Jin a Hoseok mientras se acomodaba lo mejor que podía en la cama - Lo malo es que no voy poder acompañarte al trabajo, así que Hobi por favor vuelve antes de las 18h00, no quiero que nada te pase o mejor llamaré a Jimin para que te traiga directamente aquí.

- Sabes que no es necesario Jinnie, oculto mi olor no creo que me pase nada si llego temprano a casa, además a Jimin le pedí que me dé todos los expedientes que necesito del caso y por el momento no está en la ciudad - habló sobándose la cabeza culpable, no le había comunicado eso a Jin - Me voy hyung, cuídate, cualquier cosa puedes llamarme a mí o a Nam.

Despidiéndose nuevamente de Jin, Hoseok salió de su hogar con un caminar lento en dirección a su trabajo, el chico de tan solo 25 años era un omega de clase S.

Pero ocultaba su verdadero ser debido a que al pertenecer a dicho rango era considerado valioso para la comunidad alfa, ¿la razón?; de cada 100 omegas solo 1 se presentaban como él. Por tal motivo a órdenes del gobierno estos omegas eran separados de sus padres y llevados a vivir bajo la tutela del mismo, donde se les proporcionaba alimentación, vestimenta y educación hasta los 18 años, edad adecuada para casarse según los alfas

Triste y cruel realidad, sí, porque aunque tuvieran algunos lujos, no eran libres de elegir como llevar las riendas de su vida.

Estaba agradecido que sus padres no hubieran permitido que nada de eso le pase, cuidaron de él lo mejor que pudieron todavía recuerda los rostros asustados de sus padres cuando se presentó y se dieron cuenta de su rango.

Sus padres sabían su destino por eso desde ese día comenzó a tomar inhibidores que lo camuflaban como un omega clase B, asi al fin sus padres pudieron estar tranquilos con eso debido a que su hijo no sería alejado a la fuerza y sería libre.

Los extrañaba demasiado, ellos habían muerto en un accidente de tránsito hace seis años, Jin -medio hermano de su padre -  fue la única persona que lo cuidó cuando quedó desamparado y estaba muy agradecido por eso.

Después de una hora en bus 6 de caminar algunos minutos, se detuvo frente a un edificio de 10 pisos, suspiró como era su costumbre.

"Hoy será un día pesado" pensó, mientras veía su celular, se dio un poco de ánimos y siguió caminando hasta llegar al elevador que lo dirigiría a su destino el piso 4. Al momento de abrir su oficina leyó: "Área de derechos omegas 1", soltó una risa sarcástica, el título de por sí era un insulto porque ningún omega podía pedir ayuda; bueno sí, el gobierno en esta ciudad los apoyaba y de cierto modo los protegía, pero él trabajaba en un bufete de abogados privados, al mando de un tirano millonario que cobra a los omegas altísimas sumas de dinero por simples trabajos.