Mentirijillas | Kookgi

No quiero

El brazo de Nayeon lo abrazaba por el pecho mientras que la pierda de Seokjin lo abrazaba por las piernas. La escena en sí, le dio gracia y al tratar de quitarse vio a la pareja abrazarse.

—Son tal para cual.—Sonrió al ver que ambos llevaban pijamas a juego. —Demasiado cursis.

—Deja de juzgar y prepara el desayuno.—Bostezo Seokjin y Jungkook rodó los ojos dirigiéndose a la cocina.

Poco tiempo tardo en unirse Seokjin para ayudarlo.

—Nayeon no se levantará hasta más tarde, desayunemos nosotros. Así que...¿qué harás con Yoongi? ¿De verdad terminaron?

El timbre interrumpió haciendo eco en la casa, sorprendiendo a Jungkook.

—Debe ser la vecina de abajo, siempre viene a pedir huevos.

Seokjin fue con algunos huevos en la mano para la puerta, y abrió.

—¿Yoongi?—Dijo con sorpresa y Jungkook desde la cocina se escondió en un armario donde guardaban la aspiradora y demás cosas de limpieza del hogar. —¿Por qué lloras amigo?

—Necesito ayuda Seokjin...no quiero perder a Jungkook.

Hubo silencio y el mayor lo abrazó.

—¿Está aquí?—Dijo mirando los zapatos de la entrada.

Asintió.

—Debería irme...yo...solo...

—No te marches Yoongi.—Dijo Jungkook desde el armario y ambos chicos buscaron desde donde salía la voz viendo al chico salir del escondite.

El impacto de ver al pálido con la nariz roja, los ojos hinchados y una imagen desalineada. Era una imagen muy similar a las otras tantas veces en las que Yoongi llegaba a su departamento anunciando que le habían roto el corazón.

Y le dolió ser la causa.

—Yoongi...

El mencionado reaccionó a la voz de Jungkook y fue hasta él para abrazarlo.

—Perdóname por ser una mierda de persona...no te mereces esto.—Dijo mientras hundía su nariz en el pecho del chico y lo apretaba entre sus brazos para hacer más fuerte el contacto.

—Cariño, dejémoslos que hablen en privado.—Dijo Nayeon que lucía aún adormilada y se llevó a Seokjin y el desayuno a la habitación.

—Pero me quiero enterar...—Dijo Seokjin quejándose mientras la chica tiraba de su mano.

—Lo que dije, no era cierto. Solo no se que me pasa, siento que esto no va a funcionar. Pero tampoco quiero que estes con alguien que no sea yo.
P-pero...pienso en que te vas a cansar de mí, y ya—Volvió a cubrir su cara.

—Yoon, las otras veces, con tus otras parejas ¿ha sido igual?

—No del todo...pero si quería que ellos fueran tú, y me enrabiaba que no me entendieran como tú. Buscaba pegas en ellos y ellos en mí.

—¿Sabes que eso está mal?

Asintió.

—Pero no se que hacer...yo solo...no quiero que me dejes, no quiero perder a mi mejor amigo Jungkook, tú eres quien a estado en mi vida más tiempo...y quiero que sea así por más años.

—No quiero ser tú amigo, Yoon...

Sus ojos se aguaron más.

—¿No me quieres?

—Claro que te quiero, y quiero un futuro contigo, te amo. Pero quiero hacer las cosas bien, no que todo se vaya a la mierda como ahora...lo solucionaremos. Quiero que seas mi familia Yoon, que seamos pareja y hasta...esposos.—Susurró avergonzado pero Yoongi , y los dos chismosos que espiaban por la puerta se llevaron las manos a la boca.

—¿Ves un futuro conmigo?

—Desde que nos conocimos. —Tomó sus mejillas y el mayor hizo un mohín tratando de contener la agitación del llanto.

—Eres tan cursi, me gusta mucho que lo seas. Aunque solo te lo reconoceré ahora mismo.

—¿Vamos a casa?

—¿Podemos antes desayunar? Jin tiene las galletas que nos gustan.

—Es verdad.

—En la segunda balda están paquetes nuevos.—Dijo Nayeon saliendo del escondite.

—¡Traidora!—Dijo Seokjin a su prometida.