La sociofobia es un trastorno psicológico; quien la padece le nace un terror inmenso a lo que piensen los demás de él. Algunos casos llegan al extremo de evitar el contacto con las personas del exterior.
Izuku ha pasado mucho tiempo evitando a las p...
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...
Una casa vacía, con las cortinas bailando por el viento, esperando a que alguien llegara y la ocupara. La limpiara y la cuidara.
Así se sentía Izuku, como una casa vacía en medio de un gran campo, alejado de todas las personas que podrían hacerle daño, deseando ser escuchado pero al mismo tiempo, temiéndole a los forasteros.
Quienes veían aquella casa, les causaba curiosidad pero no se animaban a acercarse.
¿Y si está embrujada? ¿Y si alguien malo vive ahí?
Era fácil pensarlo.
Hasta que por fin alguien se atrevió a llegar hasta esta, abriendo sus puertas y dejando que la luz del sol entrara por las ventanas. Limpiando el jardín y regando las plantas.
Haciendo más de lo que debería, llegando tan lejos que la casa probablemente le extrañaría cuando se marchara.
Qué hermoso sería si te quedaras para siempre.
¿Puedo ser tu hogar?
...
Katsuki levantó su mentón y empezó la ronda de besos.
Esos besos a los que Izuku ya se estaba malacostumbrando.
Sin importar cuánto pasara, aún no puede permitirse familiarizarse con ellos.
Lleva días dándole vueltas al mismo asunto.
¿Y si esto se termina? En algún momento va a pasar. En algun momento se va a dar cuenta de lo que está perdiendo quedándose conmigo.
Sin mencionar que aún no hablaban, aún no dejaban claros sus sentimientos y mucho menos lo que significaban estos encuentros llenos de besos.
Pero aún cuando su mente se llenaba de estas ideas, Katsuki se encargaba de vaciarla y ser él el que viviera en sus pensamientos.
Se le olvidaba todo cuando estaba entre sus brazos.
Por lo que prefirió continuar de esta forma hasta que el proyecto termine, tal vez era lo mejor. Terminar después ya sería cosa de que todo tome su rumbo. Algo que se olvidará después de un tiempo.
ー ¿Puedo hacerlo yo? ー preguntó cuando Katsuki lo dejó de besar para cambiar de posición.
Al oír eso, se tensó. Ni en sus más recientes sueños donde Izuku era el protagonista se había imaginado a él dirigiendo un beso, ¿quién era esta persona?
