" Se supone que eres un mito,
un ser que espontáneamente
puede crear lo que sea... todo
esto es magia caótica, y por
eso es que eres la
bruja escarlata. "
WANDA MAXIMOFF nunca ent...
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YO NO SOLÍA CONFIAR en la gente, solía entrar por accidente a sus cabezas y sabía que la mayoría de personas solo querían cosas de mí, mas específicamente, de mi cuerpo.
Era así siempre, no importaba si tenían 20 años mas o mi misma edad, los hombres siempre querían eso.
Incluso le pasaba a Pietro con las chicas, las cuales nada más querían estar con el porqué era lindo.
Esa era la principal razón por la cual no tenía amigos.
El punto era el siguiente, si tenía amigos tenía que saber que serian el Bonnie de mi Clyde.
Tenía que confiar tanto en él o ella como para dejar que se quede en el auto esperando mientras atracaba el banco y viceversa.
Yo no podía darme el lujo de confiar en alguien para que después al momento de las complicaciones este huyera.
Yo no podía permitirme confiar en alguien que no valiera la pena.
Vi acercarse a Yaoyorozu a la puerta del cementerio donde me encontraba, vi como tenía puesto un pantalón con una polera, iba bastante informal, cosa que agradecía, ya que yo solo utilizaba unos jeans con un top.
Una vez nos vimos esta me abrazo y hablo.
— ¿Cómo estás?
— He estado mejor, la verdad. — solté riendo un poco quitándole importancia al asunto. — ¿Cómo estás tú?
