—AAAAA— gritó emocionadamente mi mejor amiga, Nora, haciendo que su voz retumbara por toda la habitación a través de mi portatil.
—Queda muy poco para empezar el nuevo curso— dije sonriente.
—Sip— asintió, su mirada brillaba de emoción —Y estaremos juntas en clase— aseguró con una sonrisa.
—Llevamos así años— puse los ojos en blanco, divertida.
—Jo— hizo un mohín —estoy muy feliz de estar este precioso curso a tu lado Mads— murmuró con cara de pena. —Es nuestro último curso, y ¿después qué? Cada una elegirá su carrera y ni nos veremos.
—Yo también estoy muy feliz de estar a tu lado, pero juro que nunca me separé de ti— le aseguré rápidamente
Una voz femenina dijo su nombre de fondo, se giró hacia él ruido y asintió, luego se volvió hacia mi y me dio una sonrisa de disculpa.
—Tengo que irme Mads.
Desde que eramos pequeñas me llamaba Mads, porque Maddie no le salía, siempre que lo recuerdo me sale una pequeña risita nostalgica.
—No te preocupes, nos vemos el lunes.
Asintió y me colgó, por un par de segundos me quedé viendo la pantalla ahora oscura, pero alguien tocando mi puerta me hizo poner mi atención en eso.
—Adelante— dije mientras me ponía de pie.
Por la puerta entró mi hermana pequeña corriendo, dio un saltito hasta quedarse en mis brazos.
—Hola pequeña
—¿Sabes lo que pasa en un mes?— preguntó aún emocionada.
Sonreí y la miré a los ojos, es mi copia en miniatura, sólo que con el pelo rizado... rubia, ojos verde, tez clara, una cara fina, los labios carnosos, era preciosa. Esta niña va a tener muchos pretendientes cuando grande.
—Por supuesto— aseguré en un tono melodíco asintiendo con la cabeza —Que cierta renacuaja se hace mayor.
Su mirada se iluminó y me rodeó el cuello con los brazos, emocionada.
—Síiii.
—Cuanto haz crecido enana— dije con una sonrisa triste —9 años ya.
Asintió y me dio un beso en la mejilla mientras la dejaba en el suelo, volvió sobre sus pasos y salió del cuarto.
Tras eso encaminé mi camino al baño de mi cuarto.
Decidí darme una ducha larga para luego ir a dar un paseo. Estuve durante un buen rato duchandome, al salir cojí la toalla que tenía preparada y me la enrollé en el cuerpo. Me quité el moño que me había hecho para no mojarme el pelo y lo peiné mirandome en el espejo del tocador. En el momento en que iba a salir del cuarto de baño un impulso me hizo quedarme mirando el espejo por un par de segundos.
Sin pensarlo me quité la toalla, haciendo que cayera al suelo, quedé desnuda frente a el, siempre me dicen que tengo un cuerpo muy bonito, tengo unas curvas con algo de volumen, son lindas, pero no me siento cómoda. Nunca me ha gustado mi cuerpo, desde que mi ex-novio me dijo que había engordado hace unos 8 meses, dejé de comer para gustarle, me dejó y luego me diagnosticaron un TCA.
Luego de tratamiento conseguí superarlo y engordar los kilos que había perdido, pero no fue fácil, lo pasé muy mal. Aún recuerdo todos eso meses vomitando la comida, y obligándome a no comer.
No podía pensar en algo como eso ahora.
Tras ponerme una falda y un suéter emprendí mi camino a.. no sé donde, la verdad.
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•Tardes a tu lado• (Pausado)
RomanceDespués de tanto tiempo lo tendría superado. ¿Que podía pasar al abrirse con un chico?