MI HÉROE [HIGUEL]

Capítulo 6: La magia en el interior

Dibujo del muñeco misterioso para su corazón (?
XD  no me hagan caso y vayan a leer xd
¡Disfrutenlo!
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Jack, el hechicero de hielo, se había unido a su travesía; cosa que Hiro y Baymax agradecían mucho, pues en tan solo unos minutos de caminata con él de guíaya pueden empezar a ver el cielo del mediodía entre los árboles.

Significa que están cerca de salir del bosque.

Mientras tanto, habían empezado una conversación. Al principio fue formal y educada por la desconfianza, pero se fue relajando mientras el tiempo pasaba y Jack les demostraba que era inofensivo; buena persona.
Ahora seguían en lo mismo. Jack y Hiro habían entablado amistad muy rápidamente y fue muy raro para este último. Nunca había tenido uno, su tía no cuenta, su hermano tampoco y Baymax… bueno, es agradable, pero no es de carne y hueso.

—¿Entonces como funciona tu magia? ¿Es algún tipo de telequinésis? — pregunta animadamente el albino de ojos azules al joven genio. Jack era muy platicador, a decir verdad.

—¡Ah! pues…  en realidad no sé si se trate de telequinesis. A simple vista lo parece, pero solo puedo manipular objetos fabricados con metal. Los muevo a mi antojo, los lanzo o incluso les doy forma sin necesidad de una forja o calor. —explica el pelinegro.

Para ejemplificar, activa su poder para sacar la daga encantada de su bolsa y la mueve de un lado a otro, ante la mirada asombrada de Jack.

—También puedo atraerlos hacia mí como si fuera un imán. —Añade mientras atrapa la daga en sus manos. —aunque todavía no controlo muy bien esa parte.

—¡Genial! Es como si juntaras magnetismo, telequinesis y factor moldeamateria —Jack estaba fascinado. —es un buen poder.

—Oh, ¡Gracias!— la vergüenza se le sube a Hiro. Tampoco está acostumbrado a los cumplidos. —¿Y tus poderes? ¿Cómo funcionan? Había oído sobre los hechiceros y su gran habilidad para manejar varios tipos de magia, pero nunca he presenciado nada como eso.

—¡Ah! Pues es sencillo. Te explico un poco del transfondo. A diferencia de la gente normal, que debe despertar su poder con estímulos externos, los hechiceros ya nacemos con determinado tipo de magia. —Jack alza su mano derecha para que de su palma brote un pequeño copo de nieve con el que empieza a jugar. — En mi caso… creo que es obvio.

Hiro y Jack se ríen un poco.

Tal vez Hiro pueda acostumbrarse a los amigos. No está tan mal, no recuerda la última vez que estuvo tan relajado.

—¿Y cómo te diste cuenta de que habías nacido con magia? —pregunta, recibiendo otra risa de Jack.

—Es una historia muy rara. —dice Jack. —pero en teoría, yo siempre lo supe. Cuando era pequeño, me gustaba mucho jugar en la nieve. Siempre sentí que era parte de mí, como que me hacía sentir completo. Todas las primaveras eran difíciles para mí porque lloraba cuando veía la nieve derretirse.

Hiro y Baymax se enternecen. El solo imaginarse a un mini Jack riendo con las manos llenas de nieve le da calidez a su corazón. Por irónico que eso suene.

—Yo nací en el norte, cerca de las cortes élficas. Ese lugar se caracteriza por ser muy frío, pero en mi aldea era casi del diario que nevara. Cuando me sentía más feliz era cuando más nieve había, y si estaba triste, solo había viento helado. El invierno era yo totalmente. Pero nadie nunca imaginó que toda era nieve era causada por mí, menos cuando a 10 años desperté otro tipo de poder, que es volar.

Jack se eleva en el aire unos metros y luego baja. Recordándole a Hiro que también puede hacerlo.

—Impresionante. —suelta el joven genio.