De mi propiedad -Manjiro Sano-

24

"Noche caliente"

Advertencia de contenido sexual y explícito.
Sé que Manjiro es menor y mi objetivo no es sexualizarlo ni nada por el estilo.

Se despidieron de todos sus amigos, al subir a la habitación con Manjiro, tuvieron que cargar muchos regalos entre los dos.

Abrieron la puerta y la chica dejó los regalos a un lado, bien colocados y que ninguno solo se rompiera.

-¿Sabes lo que te dije antes, no? -su voz ligeramente grave, ronca, y en susurro fueron suficientes para erizar el cuello de la chica.

"Joder, joder".

Manjiro atrapó su cintura y apretó levemente atrayéndola a él, rozando su trasero con su pelvis.

-Mhm. -dejó caer su cabeza hacia el hombro de la chica, lamió sus labios y dejó un húmedo beso en su cuello.

T/n giró sobre sus talones para pasar a atrapar los labios del chico en un deseado beso.

Las manos de ella en su cabello dando leves tirones algunas veces, y las de él, en su cintura, cerca de su trasero, atrayéndola lo más cerca a el.

Manjiro no tenía idea de lo que hacia, solo se estaba dejando llevar por el deseo que sentía.

T/n tenía un poco de experiencia y sus padres le hablaron de ello, también a Akiko, y tienen conocimientos.

Se abrió paso la lengua y una lucha empezó por ver quién ganaba.

Las manos de Manjiro estaban ligeramente temblando, pero se adentraron por debajo de la camisa que traía ella.

Antes t/n se cambió para ponerse la camiseta que le había echo Mitsuya y enseñarle como le quedaba.

La fémina se separó, y el chico también.

-Yo... -miró donde estaban sus manos- l-lo siento, no quiero incomodarte. Perdona si me pasé un poco antes.

Agachó su cabeza mirando a sus pies, un tacto suave y caliente se hizo presente en su barbilla, levantándola, para mirar a su chica.

-Tranquilo, está bien. Te ayudaré hoy, ¿si? -sonrió y se acercó al cuello del chico.

Dió una lamida para pasar a dejar pequeños besos, soltando suspiros por parte del otro. Atrapó sus labios con fuerza y empezó a levantar la camiseta del contrario hasta sacársela.

Paró y miró las abdominales de él, se mordió el labio al pasar su mano por ellas. Sano estaba bastante sonrojado.

El deseo la invadió y se quitó la camiseta ella misma.

Agarró las manos del chico que no dejaba de mirar sus pechos y las colocó en ellos, moviendólas un poco y ella soltó un suspiro .

Sano estaba sorprendido y gran parte de el caliente.
Soltó sus manos pero no se movían y ella suspiró preocupada.

-Entiendo si se te han pasado las ga -fue interrumpida por el beso que el chico le dió, bajando sus manos de sus pechos a su cintura y acabar en su trasero que apretó un poco antes de levantarla y hacer que enrollara las piernas en él.

-M-Manjiro... -lo miró a los ojos y en los de él solo había espacio para la lujuria y la pasión.

La dejó caer en la cama y se separó para verla de arriba.

-Abre las piernas. -lo dijo más como una orden que la chica no tardó en cumplir, y el chico tuvo paso para acercarse más a ella.

Sacó una goma del pantalón y se recogió el pelo en un moño desordenado con algunos mechones sueltos.

"Dios, se ve tan sexy".

" Te quiero para mi, t/n".

Se acercó a su ombligo y lamió, dejando un rastro de saliva hacia el valle de sus pechos.

-Ah -estaba excitada y eso lo provocaba más, dándole seguridad en sus acciones.

Dejó marcas en la zona que salía de su sujetador y miró a la chica pidiendo permiso con sus ojos. La contraria asintió y él lo subió dejándolos libres.

Mientras lamía, mordía y dejaba pequeños besos en el izquierdo, el derecho solo estaba siendo jugueteado con la mano.

La chica suspiraba y soltaba algún que otro gemido. Notaba como su parte íntima empezaba a latir.

Mientras él estaba ocupado ella trató de bajarle los pantalones con los pies, cosa que dió frutos.

-¿Ah? Estás ansiosa, ¿eh? -sonrió ladino.

Subió su falda, que era de parte de Mitsuya también, a su cintura dejando expuesta todo su ser.

Manjiro estaba muy excitado ante tal escena.

Tocó la zona de la chica suavemente por encima de la tela, haciendo que soltara un suave gemido.

-No hagas mucho ruido, t/n. He visto enfermeras merodear por los pasillos. -río y volvió a tocar, presionando.

Empezó a mojarse en las bragas, el río y no esperó mucho para colocarse un condón.

Le dió la vuelta a la chica y frotó sus partes, al rededor de su trasero, muslos, un poco de la espalda...
Sin esperar respuesta alguna, agarró fuertemente las nalgas estrechándolas entre sus manos y entró con brusquedad en ella.

-Ah. -el chico suspiraba tirando su cabeza hacia atrás.

-Mhm. -t/n soltó un gemido que fué callado por un beso, que empezaba a acompañarse de suaves estocadas.

Entraba y salía, entraba y salía, este proceso se repitió por los próximos veinte minutos.

Apretaba su cintura, eso definitivamente dejaría marcas de sus dedos. En sus pectorales habían marcas que la chica le había echo sin miedo alguno y él en sus pechos.

Ambos se corrieron a la vez, llegando al orgasmo juntos.

Mientras Manjiro tiraba el condón a la basura t/n se quitaba por completo la ropa por una de dormir.

-Estoy agotada. -suspiraba mientras se dejaba caer.

-Más vale que aprendas a saber de quién eres, si no lo recuerdas las marcas te lo harán saber.

Ya ambos en la cama, con pijamas y tapados por una manta ella dijo.

-Para tí lo mismo, recuérdalo.

Se dió la vuelta, dándole la espalda y a los segundos sintió un suave golpe en el trasero.

-Es para que lo recuerdes mejor. -sonrió y dejó un beso en su mejilla- Te quiero. -y cayó dormido con una sonrisa en la cara.

Aquella había sido la mejor noche para ambos. Manjiro ya no era virgen y que mejor para t/n que la perdiera con ella.

-Te quiero, Manjiro.