Historia con Manjiro Sano, Mikey.
"|Te quiero|"
"|Te necesito, a mi lado|"
"|Manjiro|"
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Una historia en la cual nuestra protagonista t/n, la separan de su cuidad natal. Años después, vuelve y el pasado que pensa...
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"Navidades de sucesos"
En Navidad, la gran época que se supone que había que disfrutar rodeados de familiares y amigos, comer dulces y abrir regalos , para t/n era todo lo contrario.
Tenía que ir a la catedral, con Mitsuya, y pelear contra Taiju.
Estaba asustada. Su cuerpo temblaba y no podía reaccionar al golpe que recibió en la mandíbula por parte de Taiju.
-Lo siento, pero no me detendré ante una chica. -sonrió de una manera muy espeluznante.
-¡T/n! -Chifuyu llegó el más rápido a donde estaba ella.
Apoyada a una banca mientras Mitsuya peleaba contra Taiju, y Takemichi cuidaba de Yuzuha sin dejar de mirar a cada rato.
-¿Qué demonios haces aquí? Mikey, nos dijo a todos que te dejáramos de lado en estas cosas. -estaba nervioso pero lo disimulo.
-Cálmate Chifuyu, estoy aquí para probarme y Mitsuya lo sabe. -se levantó de la banca y miró a Taiju- tranquilo Chifuyu.
Empezó a alejarse y al ver que estaba ya lejos Chifuyu susurro, -Ánimo, t/n.
Mitsuya propinó un puñetazo en su cara, se dio cuenta de la presencia de la fémina y se relajó un poco al verla.
(Pongan la canción de multimedia, losentiránmejor).
-Vaya... No pensé que serias tan cobarde, tienes que traer a una chica para que te ayu- fue interrumpido por una patada en el estómago, bastante fuerte, de parte de t/n.
Todos se sorprendieron menos Mitsuya que le sonrió y chocaron sus puños.
-¿Qué? -susurraron Takemichi, Chifuyu, Yuzuha y Hakkai.
-Esto es lo que es ser un hermano mayor...
-... Hijo de puta.
Dieron un salto a la vez y dejaron un fuerte puñetazo en su cara provocando que sangrara.
La chica le daba golpes mientras el chico peliblanco los remataba. Obviamente, ella ni él podían esquivar todos sus golpes y empezaban a verse sangrados de los tres.
-Eres fuerte, maldita perra. -se limpió la sangre de la boca.
-No subestimes a tu rival. -sonrió.
Pero lo único que logró sentir fueron los gritos de Hakkai -¡Taka-chan! Y de Chifuyu y Takemichi -¡Chicos!
Un golpe fuerte en su nuca fue suficiente para dejar a ambos inconscientes en el suelo, y que la cabeza de t/n empezara a sangrar.
