En plena misión secreta con los GEOS, Venus se esperaba de todo, menos un apocalipsis.
En su nueva "vida" se encontrará con un grupo liderado por un Sheriff, y muchos ostros grupos con intenciones de todo menos buenas.
Ella con su liderazgo nato con...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
CAPÍTULO 5
Wildfire
—Ya estamos de nuevo...¿Qué manía tienen los de este grupo con estamparme contra las cosas?— pregunto.
Explico la situación. Habíamos acabado con todos los zombies que habían aquí, cuando de repente un hombre con una camiseta marón , la cual también pertenecía a la policía me estampa contra la caravana.
—¿¡QUIÉN COJONES ERES?! — Me grita el mongolo en el oído.
—Alguien que no es sorda gilipollas — reafirma más su agarre cuando le insulto.
—Suéltala Shane — habla Rick.
Pero el tal Shane no le hace ni caso, me sigue estampando contra la cravana. Estamos montando un espectáculo, ya que toda la gente del campamento nos mira.
—¿La conoces?— pregunta el gilipollas.
—Sí.
—¿Es de fiar? — sigue preguntando.
Yo me estoy empezando a hartar de estar en este posición.
Puedo ver por el rabillo del ojo a Daryl viendo todo el espectáculo apartado un poco del grupo ando justo en la barbilla del tal Shen,
—Shane —advierte Rick.
El tal Shane ya me cae mal, para que negarlo.
—Ya me he cansado — hablo y recibo la atención de todos.
Con mi cabeza doy un cabezazo hacia atrás dando justo en la barbilla del tal Shane, le cojo el brazo con el que aprisionaba mis manos a mi espalda y lo giro a la vez que yo cambio de posiciones. Todo esto en menos de unos segundos. Dejando a todo el campamento boquiabierto.
Le suelto y estiro mis brazos.
—¿Qué coño?— pregunta Shane enfurecido mientras se acaricia la barbilla.
—No eres el único que ha recibido formación militar. Aunque eso sí, yo muchísima más formación que tú — le digo chulesca.
—Bien — Rick se pone entre medio de nosotros — Ella es Venus, y es una nueva integrante del grupo. Confío en ella, nos ha ayudado en la ciudad y no ha dudado ni un segundo en salvar las vidas del grupo hace apenas unos momentos — habla Rick hacia todo el grupo.
—Hey — levanto a cabeza en forma de saludo.
—¡MAMÁ ELLA ES QUIEN ME SALVÓ! — grita el niño al que cogí antes.
—Muchísimas gracias — se acerca un mujer delgada — Has salvado a mi marido y a mi hijo. No tengo cómo pagarte. Yo soy Lori — me extiende la mano, la cual correspondo.
