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     – Harry hijo, son las nueve de la mañana, no tienes clase? – el grito de su madre del otro lado de la puerta lo despertó, tardando unos momentos en entender lo que pasaba.

      Lo siguiente que escuchó fue el picaporte de su puerta moverse y el intento fallido de ingresar a su habitación.

   – Harry? Por qué tu puerta está cerrada? – esto terminó de despertarlo.

    Abrió los ojos en grande, observando al castaño que aún dormía profundo completamente inmutado de la situación.

     – Estoy despierto mamá, ya me levantó! – gritó en dirección a la puerta.

      – Lou, es tarde y mí mamá está en la puerta, debes irte – susurró a centímetros de la cara del castaño, que seguía sin hacerle caso. Probó con sacudirlo por el hombro. Louis gruñó y apretó más fuerte la mano en su cintura, quejándose entre sueños.

       – Estás bien Hazz? Tu nunca cierras con llave – y su madre seguía afuera, y Harry sabía que no se iría sin ver qué estuviera bien antes. Rayos.

      – Lou porfa, debes esconderte – sacudió más fuerte, y le tapó la boca justo a tiempo para evitar que un alto quejido saliera de sus labios. Los ojos azules lo miraron confundido un momento, hasta que Harry le hizo una seña de silencio y apuntó a la puerta.

       – Ya te abro ma, no sucede nada – exclamó safandose rápido del agarre de Louis y parandose de la cama.

       Le hizo seña a Louis de que se metiera debajo de la cama, y este se quejó en silencio un momento antes de arrastrarse debajo del mueble, asegurándose de tomar su camiseta y sus zapatos.

       Harry abrió la puerta y sonrió a su madre, poniendo su mejor expresión de sueño e inocencia posible.

        – Buenos días, ya bajo a desayunar, anoche me dormí tarde – explicó. Su madre miró sobre su hombro a su habitación y luego a él.

         – De acuerdo, te espero en la cocina – dijo revolviendo sus rizos antes de irse hacia las escaleras. Harry cerró la puerta y soltó un suspiro, pero espero a escuchar a la mujer bajar todas las escaleras y alejarse antes de decirle a Louis que saliera.

         – Que linda manera de decir buenos días, tirandome debajo de tu cama – la sonrisa en sus labios hizo a Harry sonreír también, y agarrarlo por las mejillas y plantarle un beso en los labios.

         – Eres tan lindo, pero duermes como una roca – bromeó, disfrutando como Louis lo abrazaba estrechamente por la cintura y restregaba su cara en su abdomen cariñosamente, causándole algo de cosquillas.

          – En mí defensa, solo duermo bien cuando duermo contigo. no me arrepiento de haber empezado a colarme en tu habitación por la noche, pero temo que algún día los vecinos me vean trepando y llamen a la policía o algo – Harry río acariciando su cabello.

           – Yo temo más por mis padres, si papá te viera aquí en la noche sin camisa en mí cama, perdería la cabeza.

           – Lo sé, no hacemos nada pero sé que se vería mal. Pero dormir contigo es lo mejor que me ha pasado, eres un pequeño angelito que me canta para dormir, no quiero soltarte. puedo ir contigo a universidad así? pegado a tu torso – preguntó comenzando a dejar leves besos bajo la camiseta de Harry, quien río dulcemente.

           – Ojalá pudieras, si fuera por mí no me separaría de ti ni un segundo del día Lou – se inclinó hacia abajo volviendo a juntar sus labios. Louis terminó cayendo hacía atrás en la cama, tirando de él en el proceso. Varias manos, caricias y besos en sus cuerpos más tarde, Harry se obligó a separarse pq sino su mamá iba a volver a subir.

        Veinte minutos más tarde, ambos estaban vestidos, y Louis estaba parado junto a su ventana listo para irse a escondidas de nuevo. Por esta razón, Harry lo abrazaba con fuerza, escondiendose en su cuello y aspirando el aroma de su perfume varonil.

        – Ni te fuiste y ya te extraño, no te quieres quedar a vivir debajo de mí cama? – preguntó dejando un beso en su mejilla. Louis río y lo tomó de la barbilla, plantando un beso en sus labios.

        – Oh bebé, si fuera por mí no me separaría de ti jamás. Trataré de pasarme por el café más tarde, para saludar a mí barista favorito – Harry sonrió grande y brillante, absolutamente feliz de la atención.

         – Te amo Lou, mucho mucho. Bajaré a desayunar, espera unos minutos así distraigo a mamá para que no te vea Salir por el jardín.

           – Yo te amo más mí bebé hermoso, nos vemos luego corazón – lo beso por última vez, acariciando cariñosamente su cintura. Harry sonrió en el beso.

          – Adiós Lou – se despidió antes de apurarse a la puerta, evitando pensar un poco más y querer quedarse adherido a Louis todo el día. Dios, que enamorado que estaba.



🌷🌷🌷

Holaaaa jaja cuando tiempo o nO, perdón por desaparecer la verdad que, pasé por un desamor y no estaba para escribir cosas románticas solo quería patear cosas ahrE

pero bueno, we are back babyyyy, perdón por haber dejado esto colgado tanto tiempo, si van a seguir leyendo, gracias por esperar y por sus mensajitos 😭💐❤️❤️❤️

   
   

sk8er boi - larry stylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora