Déjate Enamorar || N.H ♥

Capitulo 1

Me levanté  como un día normal; ir al colegio, ver a Katy, estar con Harry, hacer los deberes, etc. Pero algo me decía que hoy no sería un día normal, era un resentimiento.

Terminé de vestirme y bajé de mi habitación a desayunar con mi mamá. Era hija única,  mis padres tenían más de 4 años de haberse separado, así que sólo vivía con mi madre desde ese tiempo. A mi padre a duras penas lo veía cada año pero estaba en constante contacto con él aunque fuera sólo por llamada. Por otro lado, mi madre trataba de estar lo más que pudiera al pendiente de mi, pero administrar una empresa no es nada fácil por eso es que le agradezco tanto que se preocupe demasiado por mi bienestar.

- Buenos días, mamá - dije al llegar al pequeño ante comedor que había en la cocina.

-Hola mi amor- respondió ella con una sonrisa, como siempre.

Tomé un recipiente y me preparé algo rápido, sí, cereal.

Mientras me llevaba una cucharada de cereal a la boca, el teléfono sonó.

- Yo contesto - dijo mi mamá, yo asentí y seguí desayunando.

Mi mamá no decía nada pero estaba pálida, y a decir verdad eso me ponía los nervios de punta.

- ¿Qué sucede? - pregunté un poco asustada.

- Tu pa-papá - dijo ella entre sollozos.

- ¿Qué le pasó? - grité.

- Está mu-muerto.

Al escuchar eso de sus labios, me tomó unos segundos procesar las palabras que acababa de decir y cuando eso sucedió mis ojos se nublaron, miles de cosas empezaron a atormentarme y el recipiente que traía entre mis manos cayó al suelo.

Cuando desperté estaba en la casa de mi tía Franc. Todo fue tan rápido, mi mamá ya había tomado un vuelo para México. Ella debía asistir al funeral de mi padre, aunque  ya estuvieran separados  fue su esposa y tenía que hacerlo, regresaría 3 días después del funeral. No me llevó con ella porque pensó que era lo más conveniente, no me vendría nada bien ver a mi papá en aquel ataúd.

Por más que quisiera no podía hacer nada para evitar sentirme de está forma, odio tanto no poder despedirme de mi padre como se debe, pero odio más no haber convivido con él los últimos días de su vida.