Capítulo 10

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-Hey Shu ¿has visto a otros fantasmas?- Laito le habló.- Hey Shu ¿has podido hablar con ellos?

Yo simplemente reía en una esquina viendo como Laito molestaba al rubio una y otra vez preguntando cosas innecesarias. Shu lo ignoraba pero se estaba impacientando poco a poco, juraría que era eso lo que Laito estaba buscando.

-Oye Laito, que tal si dejas a Shu tranquilo y conversamos un rato. Sé que debe ser extraño para ti que un fantasma te hable pero-

-¿Hablas en serio? ¡Claro que me gustaría! De hecho estaba molestando a Shu esperando que aparecieras.- confesó.- Como aún no puedo verte no sabía si estabas aqui o no.

-Yameemocioné.

-¿Qué?

-No, nada. ¿Entonces somos amigos?

-¡Por supuesto!

Podría jurar que en ese momento comenzamos a correr por un campo de rosas mientras reiamos a carcajadas como si fueramos un par de pasivas. Bueno, yo si era pasiva pero él...

-Entonces cuéntame ¿como te va con Yui?

De repente sus mejillas se pusieron rojitas, tan lindo.

-No es tan malo como pensé, ella es... bastante linda.

-Ya sé que te gusta, no me lo ocultes porque yo lo sé todo.- mentí.- ¿Que tal si la invitas a leer un libro juntos? Seguro a ella le gusta.

-Pero es que Ayato...

-Está detras de ella todo el día.- Shu completó la frase de Laito.

-Ay, yo pensaba que estabas muerto.- bromeé un poco.

-La que estas muerta eres tú.

-¡No me simpatizas!

Luego de eso fue la hora de ir a la escuela, ese era mi tiempo más aburrido. Normalmente la pasaría junto a Shu en el salón de música pero también quería espiar a los demás. Aunque como ahora tenía un nuevo amigo se escapaba entre clases para venir a conversar un rato conmigo.

-Hace días no me cruzo con mi gemela.- mencioné.

-¿Gemela?

Cierto, Laito no sabe sobre ese tema.

-No es nada del otro mundo, solo una chica del instituto que es idéntica a ella. Solo que es menos subnormal.

-¡Estúpida, mis sentimientos, idiota!- le grité.

-Nah, seguro Yurei es más bonita y divertida.- Laito me defendió.

-Obvio que si.- solté una risa toda tonta.- Laito me sonrojas.

Reimos como tontos por un buen rato, ahora no estaba tan aburrida y Shu podría descansar un rato de mi aunque no para siempre. Siempre iba a estar presente para molestarlo.

-Eso me recuerda ¿eras tú la que me molestaba cuando estaba en la habitación con Yui?- rayos me descubrieron.

-Debo decir que tienes un bonito trasero.

-¡Yurei!

-¿Que tiene de malo? Igual ya te he visto completamente desnudo.

-Pero yo a ti no te he visto.

Iba a ofenderme porque pensé que hablaba de verme desnuda pero luego entendí que se refería a verme físicamente. Si cierto, él quería poder verme desde un principio.

-¿Ves esa pared detrás de ti?- le señalé y él asintió.- Soy tan plana como ella.

Se echó a reir como nunca, tal parecía que le habían contado el mejor chiste de su vida.

-Nodarisa.- susurré.

-Ay perdón, pero es que en serio eres graciosa.

Media hora más tarde Laito se tuvo que ir a clases nuevamente, quedé a solas con Shu. Pensé que me regañaría por ser tan molesta y gritar tanto pero solo se quedó en silencio.

-Hey Yurei ¿estás molesta con Subaru o algo así?- preguntó de repente casi provocandome un infarto.

-No ¿porque preguntas?

-Nada, es que ya no duermes con él como lo hacías antes.

-No te preocupes por eso, es solo que el SubaRei pasó de moda.- bromeé.- El ShuRei es lo de hoy.

Y me lancé a abrazarlo por lo cual comenzó a revolverse incómodo en su lugar. A pesar de que yo si podía tocarlo él me sentía como si fuera un simple escalofrío, por ello últimamente lo molestaba de esa manera.

Al fin y al cabo yo estaba feliz. Ahora eramos más en la familia de Yurei.

El fantasma de una dialover [Diabolik Lovers]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora