Nos encontrábamos en el centro de la ciudad, le propuse a Harry venir porque esta mañana fue una entre mil. Tenía a un ángel viviendo en mi cabaña, no era poca cosa así que estar aquí nos ayudaría a calmarnos la mente.
Cuando el ojiverde mencionó que toda su existencia la había pasado solo, mi mente me recordó mis años trabajando y lo mal que la pasé porque sin querer alejé a toda mi familia y amigos, perdiéndoles de a poco por mi culpa. Eso fue duro y no quería que Harry siguiera sintiéndose de esa manera, no cuando yo lo puedo acompañar.
Dejando de lado los sentimientos tristes, descubrí que me encanta el cuerpo del rizado contra el mío al momento de abrazarnos y la, ahora, bola de sensaciones que me produce cuando esta cerca o me mira. Puede que sea prematuro, pero lo quiero y mucho, me gusta compartir vivienda, tiempo y momentos junto a él, porque el tiempo se vuelve especial y mi sonrisa no se cansa de levantarse cada vez que esta en mi vista o cuando dice sus cosas raras en un idioma raro.
Decidí que el cine sería buena opción por lo que llegamos y fuimos por nuestros boletos, pero jamás esperé verla ahí, estaba reluciente.
-¿Louis? -Estaba más que sorprendido.
-¿Realmente eres tú? -Ella asintió y sonrió, salió rápidamente de la pequeña taquilla y me acerqué a abrazarla con cariño, nos separamos y reímos divertidos de la situación y como nos rencontramos después de muchos años.
-Gemma, ¡estás que brillas!, ¿Cómo estas trabajando aquí siendo una genio? -Pregunté aún con una sonrisa.
-Puede que al fin la policía me detectará y tuviera que fingir una vida normal y aburrida. -Explicó con simpleza.
Gemma y yo fuimos compañeros en la universidad, mientras yo estudiaba la carrera de administración de empresas, ella estudiaba programación. Por alguna razón nuestros caminos se cruzaron en una conferencia de la universidad y desde ese día éramos inseparables, pero llegó un momento que la pelicaramelo se metió en problemas graves con la policía y sin avisar desapareció del mapa. Gemma era y es una genio que le encanta romper reglas y hacer lo que quiera, toda una fiera.
-Cuando dejarás eso Gemma, es la razón por la que te dejé de ver. -Recordé lo mal que la pasé después de su desaparición, era casi mi hermana.
-No seas amargado Tomlinson, te encantaba tambien. -Respondió y asentí estando de acuerdo.
-Oye, pero no seas grosero y preséntame al chico... -"Harry, oh no, eres idiota Louis". Me regañé mentalmente.
-Oh si, lo siento. -Miré al rizado con disculpa y él solo sonrió acercándose, eso me alivió.
-Harry, ella es Gemma y Gemma él es Harry. -Presenté y se dieron la mano en un saludo amistoso.
-Te doy mi numero si me das dos boletos para esa película. -Bromeé y reímos mientras volvía a la taquilla e imprimía los boletos.
-Espero vernos después. -Se despidió Gemma de los dos y asentí tomando los boletos para después caminar a la tienda de dulces y palomitas, tomando una vez más la mano de Harry.
Compramos todo lo que Harry apuntó y finalmente llegamos a la sala para tomar asiento y comenzar a ver la película. Este genero de películas no era mi favorito, pero disfruté ver como en cada momento cambiaban las expresiones y emociones del rizado conforme avanzaba la historia proyectada en la gran pantalla. Por la mitad de la película pasó una escena donde se tomaban de las manos justamente en una sala de cine, demasiado cliché para mi gusto, pero al parecer a Harry le entusiasmo porque noté como volteaba a mirar nuestras manos que se encontraban muy cerca, con cuidado rocé su mano para luego entrelazarlas justo como se mostró. Él sonrió en mi dirección.
-Ut amore tui comparatione Luka magna enim Eva. [Mi amor por ti es incomparablemente grande con el que siente Luka por Eva] -Dijo Harry mirándome a los ojos y de nuevo en ese extraño idioma, pero me hizo sonreír y acaricié suavemente con mis dedos su mano. Me sentía un maldito adolescente.
Las escenas fueron pasando, Harry cada vez más concentrado en la película, mientras yo comía de las palomitas que habíamos comprado. Fue cuando escuchamos extraños sonidos de la ultima fila que los ojos de Harry saltaron a los míos. Sabía muy bien de que se trataba, seguramente personas muy cariñosas, por lo que tomé la decisión de que no quería quedarme a escuchar y menos que Hazz lo escuchara. Me levanté y jalé suavemente a Harry con la mano que tenía junto a la mía.
-¿Lou?, ¿Qué pasa?, esta por acabar la película. -Realmente no podía permitir quedarnos y lamentaba tener que interrumpir el pequeño momento.
-Hazz, es que... tenemos que ir a comer. -Solté la primera excusa que se vino a la mente.
-Ammh, esta bien. -Respondió con tono decepcionado, lo que me hizo sentir culpa, pero realmente teníamos que salir, esas personas se estaban volviendo escandalosas.
-Prometo que volveremos una próxima vez. -No quería arruinar el animo del ojiverde, así que mencionar una segunda visita al cine fue buena idea porque los ojos de verde profundo brillaron aun estando en la obscura sala.
Salimos lo más pronto que posible y la débil luz del sol nos golpeo una vez más, seguía tomando la mano de Harry guiándolo de nuevo a la taquilla.
-Gemma. -Saludé otra vez.
-Louis, ¿ya acabó la película? - Preguntó con sus ojos curiosos en Harry.
-No, pero deberías de, ya sabes, mandar a sacar un par de escandalosos clientes. -Reí por la nariz.
-Oh no, lo siento chicos, la gente esta descontrolada por aquí, no saben respetar. -Reímos y saqué una tarjeta de mi cartera, se la entregué a Gemma.
-Por si me necesitas, solo llama y te responderé, ahora ya nos vamos así que espero tu llamada. -Nos despedimos con la mano y salimos de aquel cine.
-Ella es agradable. -Sonrió Harry con sus hoyuelos.
-Si, ella era como mi hermana hace unos años, pero es muy rebelde y le gusta meterse en problemas grandes.
Harry apretó mi mano y dejó un pequeño beso en mi mejilla, lo que me revolvió todo e hizo que instintivamente lo tome por la cintura para seguir caminando entre las personas.
-¿Por qué esas personas hacían esos sonidos, Lou? -Preguntó el rizado confundido, mientras sentía un escalofrió por todo el cuerpo.
-B-bueno estaban... haciendo cositas. -Traté de suavizar lo obvio como si de un niño pequeño se tratara, pero luego caí en cuenta que Harry era alguien maduro y que en algún momento tendría que saberlo, por lo que volví a contestar.
-Estaban teniendo sexo, así se llama. -Mis manos sudaban, en espera de lo siguiente.
-¿Y cómo se hace eso?, recuerda que no se completamente todo sobre humanos. -Ahora sí que estaba nervioso, no sería fácil explicarlo.
-¿Que tal si vamos por un helado y ahí te lo explico? -Ofrecí y él solo me miró más alegre y emocionado. "Esto será vergonzoso", pensé.
Canción recomendada del capítulo:
Verbatim - Mother Mother
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ATTE. Dan ^_~
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Ángel sin lugar... Yo te daré un hogar |LS.
ФанфикHarry, un ángel de Neque que despues de muchos intentos llega a la Tierra encontrándose con Louis, un chico amable que le ofrece hospedaje en su cálida cabaña. Lo que ninguno de los dos sabe es que no es la primera vez que se conocen y que tendrán q...