#A Great Bachelor Party#

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Yujin se acurrucó en los brazos contrarios, sintiendo los suaves labios de su prometido besar su frente, y sonrió, oliendo el aroma a galletas de Hanbin, este le devolvió la sonrisa y le beso dulcemente acariciando sus mejillas.

-¿Te e dicho que adoro besarte?-pregunto el de mejillas regordetas, separandose para servir de comer-

-No hace falta que lo digas, con que me beses cada segundo es suficiente para saber la respuesta-

Han se acercó a el y se sentó en la mesa, comiendo la delicia que su futuro Alfa había preparado, ambos platicando de barbaridades mientras desayunaban, y el castaño veia "discretamente" su anillo de compromiso, causando risas en el Alfa.

-Tus ojos dolerán de tanto ver el anillo-

La voz de Hanbin se escuchó, haciendo que el rubio le mirara indignado.

-Nopi!yo lo tengo que apreciar-respondio infantil, dándole ternura al contrario- oye, te quería decir que GunWook y Taerae me organizaron una fiesta hoy por la noche, es algo como una despedida de soltero puesto que soy Omega y Tae iso lo mismo antes de casarse con mi hermano.

El Alfa dejo de comer y le miro seriamente, Yujin juro que en serio sintió un poco de miedo si no es que fuera su prometido.

-No-la voz del Alfa resonó en el departamento-

El Omega rubio bajo la mirada arrepentido y asintio con la cabeza, comiendo en silencio, el alfa rápidamente se arrepintió y suspiro, agarrando la mano del menor.

-No me gusta la idea de eso nada más, aún no te he marcado y puede pasar algo, me preocupas-dijo-

-Me gusta que te preocupes por mi-

Yujin le sonrió a su amado, un poco avergonzado, hasta que la vista del menor choco contra la maleta del pelinegro, pucheriando al recordar que Hanbin se iría ese mismo día a la casa de su familia para organizar el salón donde sería la ceremonia. El Omega estaba feliz de por fin estar a tan solos días de casarse, a tan solo cuarenta y ocho horas por fin se uniría de todas las formas posibles con Hanbin.

Ambos se conocieron en la universidad, fue un encuentro casual en la papelería frente al edificio, Yujin había olvidado por sorpresa un documento importante para presentar su examen y tenía unas fallas con la impresora, termino por golpear el objeto por el enojo, su mejor amigo claro trato de ayudar sin embargo desconocía sobre ese tipo de cosas por suerte un Alfa se había acercado para ayudarles a resolver el problema. El Omega había quedado completamente flechado por el tipo, encantando con su sonrisa y la forma que sus ojos se encogian al sonreír.

Al ingresará a la Universidad Yujin descubrió que el tipo era un Alfa llamado Hanbin de la facultad de leyes, de una forma u otro terminaron por toparse una segunda vez con una oportunidad de conocerse mejor, las cosas fluyeron en cuestión de meses y su relación se forjó, sus sentimientos crecieron con el tiempo y ahora, ocho años después, por fin se casarían.

Yujin no quería estar lejos de el nunca.

-¿En serio es necesario que te vayas? -Yujin iso puchero, ganándose una mirada de un poco de fastidio por parte del mayor, pero el castaño no se tomó el tiempo de darle importancia a los enojos de su prometido-

-Pasado mañana será la boda, sabes cuáles son las tradiciones de mi familia, -Hanbin se notaba enojado con ello, y no solo el, ambos estaban inconformes con tener que seguir las tradiciones del la familia Sung-

Principalmente Yujin desde el principio tuvo problemas con sus futuros suegros, jamás se han llevado bien, cuando se conocieron y fue presentado como el novio de su único hijo Alfa los señores se notaron inconformes, alegando que Hanbin tenía mejores opciones de omegas para poder tener una relación. Las cosas empeoraron unos cuantos años después, Yujin ya no era despreciado por los Sung si no que en su lugar trataban de ignorarlo o simplemente le hablaban cuando era necesario, especialmente la madre de Hanbin era quien lo hacía menos ante cualquiera, Yujin lo soportaba por Hanbin, por el amor que sentían.

Sin embargo cuando anunciaron que se casarían los señores empezaron a enfriarse todavía aún más, indicándoles que por cuestiones de familia no podían forjar un lazo hasta la noche de bodas, y Yujin tendría que cuidarse de cualquier intento de marca antes de ello refiriéndose a el como un omega fácil e manipulable, al igual, por alguna extraña razón tendrían que pasar los últimos dos días antes de la boda completamente separados, sin contacto alguno.

Un estupidez, una completa estupidez, el Omega pudo haberlo tomado como una experiencia única cuando tenía dieciocho años, sin embargo ahora tenia veintiséis, era un adulto y a pesar de ser infantil, cursi e indefenso sabía analizar las cosas.

-No quiero dejarte solo -el alfa lo envolvió entre sus brazos, besando su nuca con cariño- pero tengo que hacerlo, aunque con lo que me acabas de decir mis ganas de quedarme solo aumentaron.

-Tranquilo, de todos modos acompañaré a Gyuvin a probarse el traje.

-¿Estas seguro que Gyuvin sea tu dama de honor? -el menor miro confuso a Hanbin- digo, ¿no podia ser Taerae tal vez?, el es Omega, Kim es un Alfa, no crees...que sería un poco raro.

Yujin dejo los palillos a un lado y lo miro ahora enojado, ¿Raro?,¿Le parecía raro pedirle a su mejor amigo que fuera su dama de honor?

-No, Gyuvin es mi mejor amigo, asi que pasado mañana el se parara junto a mi en el altar siendo mi dama de honor, no se por qué dices eso, ya ha sido la dama de honor desde que pensamos en casarnos, además, te recuerdo que mi amigo ya se casó con Ricky, asi que no puede ser dama de honor.

Hanbin miro enojado al Omega por su tono, y se levantó con molestia.

-Gyuvin es muy entrometido, jamás me agradó -solto el Alfa mirando fijamente al castaño- ¿Le gustas acaso?, ¿No sabe que gustar de un omega comprometido es de mala imagen para un Alfa?

El Omega no supo que responder, solo se abrazaban y debes en cuando unos besitos en las mejillas, algo normal con su mejor amigo desde primaria.

-Solo somos amigos, eso hacemos desde antes de conocerte, el no gusta de mi, estúpido.... Gyuvin está saliendo con ZhangHao, es incapaz que Hao Hyung no le guste.

Y bueno, la pareja estaba de acuerdo con eso, ya conocían a ZhangHao, en especial Yujin, su amigo se lo había presentado hacia unos tres años después de su viaje a Nueva York, le confesó que estaban saliendo con el lindo castaño de rulos de ojos grandes y que Hao a pesar de ser Chino se crio en América y se le había olvidado el idioma natal pero hablaba distintos más como el Coreano, el Omega era delicado, fino, respetuoso, inteligente, con gran sentido del humor y tierno, sobre todo poseía una gran belleza, perfecto para Gyuvin. Era incapaz que alguien rechazara a ZhangHao, por qué era un Omega hermoso y fino Ademas de ser muy agradable para la gente.

-¿Pero ZhangHao está de vieje no?-pregunto el mayor, un tanto disgustado-

-Volvera para la boda, Gyuvin y el son invitados de honor, puedes estar tranquilo, Gyu solo es mi dama de honor y ya.

-No me agrada esa idea tuya, en mi familia nunca hubo un Alfa como dama de honor, no dañes nuestra imagen amor.

El pelienegro dejo un beso en sus labios y salió del departamento, Yujin iba a quejarse, pero ya no estaba el mayor.

En realidad, Hanbin solo tenía interés, no amor, el Omega era exageradamente hermoso y tenía buen cuerpo, sin pasar la fortuna de los Han, eso era suficiente para el Alfa, quien tal vez tenía dinero, pero quería más poder y satisfacción, eso se lo daría sin rechistar ese estupido e inocente Omega que no se daba cuenta de las acciones, era tan inocente...pero más inocente era Hanbin al pensar que alguien no sabía su secreto, pobre...

Por qué esa boda no se realizara...

Y de eso se encargara Gyuvin...

Despedida de solteroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora