Te conozco...

El extraño amor de Loki, Frigga interviene.

Después de un apacible baño y de irse a dormir sin cenar, Emma descansaba tranquilamente siendo las 2 a.m. sintió que unos brazos la rodeaban y acariciaban sus senos.

Emma se estremeció, pero aun no despertaba en su subconsciente pensó que solamente era un sueño erótico.

Las caricias continuaron, por encima de las ropas de dormir de Emma, de sus pechos se deslizaron hasta su cintura y comenzaron a besar su cuello, Emma suspiro nombrando a Loki y aquella mano se deslizo hasta la entrepierna de ella acariciando suavemente su pelvis.

Emma se despierta y ve de reojos el cabello de Loki, dejándose llevar por sus caricias embriagadoras, que le hacían excitarse cada vez más.

Emma: Loki... que... haces...

Loki: tantas oportunidades de poder hacerte mía, y aun no he podido acariciar debidamente tu piel.

Emma se voltea y besa a Loki apasionadamente colocando su pierna sobre las piernas de él, pero Loki la quita bruscamente y se sube sobre Emma, comenzando a quitarle la ropa sin tener delicadeza para con ella.

La poseyó sin el más mínimo amor, sino que solamente era para saciar su hombría. Terminada la faena se sentó en la cama y se colocó su ropa, ella se volteó dándole la espalda a Loki.

Loki: Te veo mañana Emma. –Loki se pone de pie y se retira, una vez fuera, Emma suspira entre sollozos y ahoga su llanto en la almohada.

Los primeros rayos de sol iluminaron los semblantes de Emma, ella se frota los ojos pensando que lo que había pasado a la noche era tan solo un sueño, pero al verse desnuda se dio cuenta que efectivamente había sucedido, y por un instante se quedó pensando en Sebastián.

La madre de Loki entra a la habitación y ve a Emma que está vistiéndose con desdicha, y se acerca lentamente acariciándola por los hombros.

Frigga: Hola Emma.

Emma: ¡Su majestad! –Emma quiere levantarse para hacer una reverencia.

Frigga: No te molestes cariño. Emma, ¿Qué te sucede? ¿No te agrada Asgard? ¿Quieres volver a Midgard?

Emma: No es eso su majestad, solo es que...

Frigga: No lo digas si no quieres, soy mujer y te entiendo. ¿Quieres mucho a Loki?

Emma: Sí, muchísimo. –Frigga suspiro.

Frigga: Cariño, lo mejor que puedes hacer es volver a tu planeta y olvidarte de mi hijo. Loki puede ser un joven encantador, pero no deja de ser el dios de las mentiras.

Emma: ¿Usted cree que él me está engañando?

Frigga: Emma... -Frigga acaricia el rostro de la joven. –Yo no soy quien, para suponer cosas, pero deberías mantenerte alerta en todo momento, porque, así como es de seductor lo es de embustero, es mi hijo, lo conozco más que nadie. Loki jamás se enamoró de ninguna mujer, solo te digo que tengas cuidado. –se pone de pie. –Te traerán el desayuno y mis escoltas personales pasarán a buscarte iremos a dar un paseo las dos. –se retira.

Emma queda pensando en las palabras de Frigga y una corte entra a traer un gran banquete para ella sola.

Unas horas más tarde, Emma y Frigga están en la ciudad recorriendo con el carruaje personal de la reina, Emma iba callada sin decir palabra alguna.

Frigga: ¿Quieres hablar de algo Emma? Para ser de Midgard eres muy callada.

Emma: Soy más bien tímida su majestad.

Frigga: Dime Frigga, no me suelen gustar las formalidades.

Emma: La verdad, que he estado pensando acerca de lo que me ha dicho de Loki.

Frigga: ¿Has tomado una decisión cariño?

Emma: Creo que puedo lograr enamorar a Loki. –Frigga se sonríe.

Frigga: Emma, eres tan ingenua cariño. –Frigga tomo las manos de Emma. –Mira, conozco a Loki y yo si fuera tú, lo olvidaría y me iría de Asgard. –Emma suelta las manos de la reina.

Emma: Usted no quiere que yo este junto a Loki.

Frigga: Claro que quiero cariño, lo que más deseo es que Loki sea feliz y olvide todo lo malo que lo atormenta. Y sé que esa chica eres tú, pero dudo que puedas enamorar a mi alocado hijo.

Luego de escuchar a Frigga, Emma comienza a mirar por la ventana preguntándose si era tan real como la reina decía, ya que al comienzo Loki se había comportado de una manera muy amorosa y repentinamente cambio su actitud.

Llegada la noche, siendo las 2 a.m. Loki nuevamente entro al cuarto de Emma únicamente para tener sexo con ella, acto seguido se fue, pero esta vez, sin decir ni una sola palabra.

Los besos apasionados le Loki eran puñaladas al corazón de Emma, era como si él se hubiera ensañado con un cuerpo ya muerto, mientras Loki poseía a Emma ella recordó una conversación que ambos tuvieron, cuando Loki descubrió que ella estaba enamorada de él.

"Loki: ¿Confías en mí?

Emma: Confió en ti y eso me asusta... porque te estoy dando todo el poder.

Loki: ¿Poder de qué?

Emma: De destruirme en cualquier momento."