Te conozco...

Durmiendo en la misma cama.

Emma: ¿Súbdita tuya? Ni lo sueñes. –me quita el café de las manos.

Loki: Piensas que no me di cuenta, Emma. Que tienes miles de libros... de mí. Involuntariamente me veneras, y puede ser que por ti estoy aquí. –lo quedo viendo y pensando unos segundos.

Emma: No creo. Tu estas aquí porque caíste sin querer, fuiste desterrado o el Bifrost no funciono y solo caíste, topándote conmigo accidentalmente.

Loki: ¡SUFICIENTE DE TU INSOLENCIA MORTAL, debería pulverizarte! Por tu culpa estoy en este estúpido planeta, devuélveme a Asgard.

Emma: Pero si yo no te llame, ya te lo dije. ¿quieres más café?

Loki: No, ¿Cómo se llama el lugar donde los mortales van a hacer sus necesidades fisiológicas?

Emma: ¿Baño?

Loki: ¡Si! Requiero pasar a tu baño.

Emma: Ehm... pasillo a la derecha. –recogí las tazas de café y las llevé al lavabo, después de lavarlas comencé a secarlas.

Loki: ¡Mortal! ¿Dónde guardas tus paños de algodón?

Me volteo para ver qué pasaba y veo a Loki mojado y desnudo tras de mí, me cubro la cara rápidamente quedando completamente roja.

Emma: ¡Por Dios! ¡Estas desnudo!

Loki: Como pensabas que me bañaría, ¿con la ropa puesta?

Emma: Aléjate, aléjate. No me toques.

Loki: Pero Emma, dónde están tus paños, tengo frio. –se los arrojo con los ojos cubiertos.

Emma: Toma póntelos, tapate por favor.

Loki: Ya lo hice. –me descubro los ojos lentamente.

Emma: Aquí, no acostumbramos a aparecer desnudos.

Loki: Pues en Asgard me bañan.

Emma: Pues no estás en Asgard.

Loki: Desearía poder estarlo. –ambos quedamos en silencio un rato.

Emma: Tengo ropa si quieres... de mi hermano. Se las olvido la última vez que vino.

Loki: Insinúas que no tengo ropa.

Emma: No, solamente te ofrezco para que te sientas más cómodo y no andes con ese pijama.

Loki: No es ningún pijama, es cuero asgardiano.

Emma: ¿Quieres la ropa o no?

Loki: La quiero.

Emma: Ven. –me acompaña hasta mi cuarto y le entrego. –solo no te vayas a camb... -Loki se quita la toalla y se cambia frente a mí. - ¡ahhhh! ¡Vístete rápido!

Loki: Ya está. Para ser mortal eres muy roja. –suspiro.

Emma: Déjame en paz. Si quieres puedes dormir en el sillón.

Loki: Perdón ¿Qué? ¿sillón? Soy un dios no puedo dormir en un sofá.

Emma: Escucha Loki, hay solo una cama y la cama es mía, ahí tienes el sofá.

Loki: Pues no me gusta el sofá, en el sofá duermen los súbditos o sea tú. Dormiré en la cama.

Emma: Pues lamento decirte que no podrás.

Loki: Si no quieres que te envié a la dimensión de los elfos oscuros, me darás la cama.

Emma: Pues no te tengo miedo, ni a ti, ni a tu dimisión.

Esa noche, dormimos ambos en la misma cama, pero con un muro de almohadas.

Emma: Duerme príncipe de Asgard, a ver si mañana ya te vuelves a tu mundo.

Loki: No creo poder hacerlo, porque tú me llamaste, humana indeseable.

Emma: Y si soy indeseable, ¿Por qué te quedaste viéndome en la entrada de mi casa?

Loki: Porque me hiciste acordar a un gigante horripilento con el que luche.

Emma: Pues déjame decirte que tu mirada no fue de asco, don sabiondo.

Loki: Ya duérmete mortal.

Me di la vuelta dándole la espalda y pensando que fui yo quien realmente lo había llamado, "Grave Error".