Michiko cae en desgracia

838 20 20
                                    

"¡Maldita seas, Daimon! ¡Esa cirugía era mía! ¡Me la quitáste!". Le gritó Kaji muy enojado en cuanto la vio entrar al departamento de cirugía luego de haber finalizado la mencionada cirugía.

"Tú lo dijiste, era tuya". Se burló, caminando como una diva y vestida como una con las manos en los bolsillos de la bata. Iba hacia su escritorio con él persiguiéndola por detrás, hecho una furia.

"¡Desde un principio era mía, demonio! ¡Tú lo sabías! ¡Y también me iban a dar una jugosa recompensa por hacer esa cirugía! ¡Es el hijo de un importante funcionario político que desde un comienzo había solicitado que yo sea su cirujano! ¡No debe haber este tipo de traición entre compañeros!". Se paro al lado de ella mientras Michiko se sentaba en su silla y comenzaba a jugar con su rompecabezas de llaves, cruzándose de piernas con tranquilidad.

"Pues Akira fue más astuto que tú y te quedaste sin el huesooooooooo". Se burló.

"¿Sin el hueso? ¿Cuál hueso? ¿Te estás burlando de mi? ¡Tú y tu mánager me tienen harto! ¡Siempre me hacen lo mismo! ¿Y tú te burlas de mi, tonta? ¡Voy a matarte un día de estos, Daimon! ¡Estúpida!". Se le fue encima tirando al aire los puños y sus amigos Hara y Ebina tuvieron que agarrarlo rápidamente por los brazos para detenerlo y llevárselo de allí a rastras mientras él seguía insultándola y moviendo los brazos como un loco.

Michiko simplemente se alzó de hombros y siguió con lo suyo. Poco le importaba robarle las cirugías a otros.

Aquella noche, Kaji estaba tomando cerveza junto a sus amigos en un bar, ya estaba borracho y seguía furioso por la traición de Michiko.

"Entre los miembros de una misma profesión no debería haber este tipo de mezquindades, ¿no lo creen? Maldita, Daimon, siempre está arruinándome... ¡La odio!". Exclamó, bajando de golpe la jarra de cerveza contra la mesa, haciendo saltar su contenido mojando tanto a Ebina como a Hara.

"Bu---bueno, la verdad lo hace con todos nosotros, no sólo a ti, amigo...". Le dijo Ebina mientras se secaba la cara con un pañuelo.

"¡Lo sé! ¡Pero se ensaña más conmigo porque sabe que le piso los talones con mis increíbles habilidades laparoscópicas!".

Hara y Ebina se miraron entre ellos, incrédulos. Kaji los asesinó con la mirada.

"¡Oigan! ¿Acaso creen que no soy tan bueno como ella, eh?".

Hara sonrió muy nervioso mientras Ebina tomaba de su propia jarra de cerveza, mirando hacia otro lado.

"Bueno... Si eres bueno, pero no tan bueno como ella... Ya deberías saberlo después de todos estos años, Kaji...". Tartamudeó Hara.

"¡Vete al diablo! ¡Ojalá ella también se vaya al diablo con ustedes! ¡La odio!". Tomó otro trago de cerveza y se limpió la espuma de los labios con la manga de la camisa, luego, alzo el puño en alto y dijo en voz alta, llamando la atención de todo el mundo. "¡Te maldigo, Michiko Daimon! ¡Te maldigo, perra! ¡Que la mala suerte te persiga, maldita traidoraaaaaaaa!".

Al otro día, Kaji tenía un dolor de cabeza fenomenal. Se estaba quejando de eso con medio cuerpo tirado sobre su escritorio cuando el doctor Morimoto y el doctor Tako entraron como un rayo al departamento de cirugía.

"¿Se enteraron? La casa en donde vive la doctora Daimon se incendió anoche, perdió todas sus cosas y su mánager quedó internado en coma aquí mismo!". Soltó apresuradamente Morimoto, dejando a todo el mundo sorprendido, especialmente a Kaji.

"¿Y el demonio está bien? ¿En dónde está ella ahora?". Kaji se olvidó de su dolor de cabeza y se puso de pie, preocupadísimo mientras los demás doctores se le quedaron mirando con la boca abierta. Cuando se trataba de entrar en acción, Kaji siempre era el primero.

DOCTORA XXX MICHIKO DAIMON. EL DEMONIO BAJO MIS ALAS (Doctor-X/Doctor-Y)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora