DOCTORA XXX MICHIKO DAIMON. EL DEMONIO BAJO MIS ALAS (Doctor-X/Doctor-Y)

Las dudas de Kaji

Durante todo el resto de la tarde Michiko y kaji se dedicaron a sus obligaciones, ambos estaban inusualmente de muy buen humor, ella estaba más comunicativa con los demás y Kaji menos gruñón, llamando la atención de todo el mundo. Sus escritorios estaban separados a una buena distancia, pero de vez en cuando se lanzaban una que otra miradita picarona, sonrojándose ligeramente. Hara ya se había percatado de esas miradas y había comenzado a sospechar algo.

Michiko, a pesar de que su idea inicial era experimentar con él, ahora se sentía muy emocionada y atraída con la idea de tener novio por primera vez en su vida. De por sí ella siempre se había tenido una autoestima muy alta y nunca necesitó de los halagos ajenos para sentirse especial, pero el saberse especial para una sola persona era algo muy diferente, haciéndola sentir muy especial de otra manera.

A pesar de saber que ella había sido especial para Hachi, ella solo lo veía como a un gran amigo, alguien muy bueno a quien admirar, pero nunca había sentido otra cosa por él. Pero Kaji... Con él podía compartir lo que más amaba en el mundo: la cirugía. Y si él también se prestaba a dejarse amar a su manera, era el hombre indicado para ella.

Kaji también estaba muy emocionado con la idea de tener a Michiko como novia. Después del fiasco con Sanatang, sólo había tenido romances de una noche con una u otra mujer de vez en cuando, y menos desde que se había convertido en director del departamento de cirugía, se había tapado tanto de trabajo y responsabilidades que últimamente se molestaba por todo y no lograba caerle bien a ninguna mujer. Pero el lado cariñoso de Michiko lo había renovado por completo, sintiendo que volvía a sentirse joven de nuevo. Estaba realmente feliz, halagado porque una mujer tan especial como ella lo había escogido para ser su primer novio.

Michiko Daimon, a pesar de su complicada forma de ser, era la única mujer que podría comprender su gran amor por la cirugía.

Kaji suspiró como un tonto y colocó el mentón sobre las manos, con cara de bobo. El director Ushio, que estaba en el escritorio de al lado, y el doctor Hara, que estaba apoyado en el escritorio de Kaji, lo miraron raro.

"¿Te pasó algo muy bueno hoy, Kaji?". Le preguntó Hara.

Kaji suspiró, soñando despierto.

"Creo que por fin tengo novia otra vez...".

"¡Oooooooooooooh! ¿En serio?". Hara se dio vuelta y colocó las manos sobre el escritorio, inclinándose muy sorprendido. Ushio casi se sacó los anteojos cuando quiso rascarse la frente. "¡Dime! ¿Quién es? ¿Cuántos años tiene?".

"No te lo diré aún, creo que estaremos a prueba primero...". Se sonrojó.

"¡Vaya! ¡Genial!".

"¿Genial? ¿Ponerte de novio justo ahora que tienes tantas responsabilidades, director Kaji?". Se quejó Ushio. "Sinceramente no creo que puedas estar a la altura con una mujer, últimamente has estado muy estresado, sólo harás el ridículo, ¿sabes?".

"¿El ridículo?". Repitió Kaji, preocupado, apuntándose a si mismo.

"¡Director Ushio, no sea cruel!". Se quejó Hara. "Ya sabemos que el director Kaji ya está en las últimas, pero no debe deprimirlo de esa manera cuando por fin encontró novia!".

"¿En las últimas?". Repitió Kaji.

"¿Te refieres a una gallina con pocos huevos?". Se metió Ebina, que había estado escuchando aquella conversación en completo silencio.

"¿Pocos huevos...? Pero sólo tengo 57 años...". Murmuró Kaji.

"¡Ay! ¿Y de dónde saliste tú? ¡Me asustaste!". Se quejó Hara, dando un brinco y llevándose la mano al corazón. "¡Y no digas algo tan inapropiado, Ebina! ¡Lo deprimirás!".