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-No te atreverías.

-No me provoques.

-No lo haría...-

Cuando se dio cuenta ya tenía la varita en su cuello pero la sonrisa no se iba.

Dijo el hechizo y la varita apenas soltó brillos.

-Pero que?

-Te gusto mi creación?

-Fred. Dijiste que no me volverías a robar la varita.

-No la robe, solo... la tome prestada.

-Devuelvela.

-Mmmm que me daras a cambio?

-No te hechizaré

-No me parece...

-Entonces que quieres?

-Un beso.

-Eso es chantaje.

Al ver que no sacaría nada, Draco se puso de puntas para alcanzarlo aunque igual lo jalo para abajo y le dio un beso en la mejilla.

-Hey así no cuenta

-Tu no especificaste donde.

Fred hizo su puchero pero Draco solo alzó la ceja con la mano extendida esperando la varita.

-Bien jugado Draco Malfoy.

-Suerte para la próxima Fred Weasley.

Le había dicho que botó la varita. Pero no lo había hecho.

La guardaba, cada regalo se quedaba ahí, bien resguardado, era suyo, lo que le quedaba.

Tenia su bufanda, la caja improvisada del primer chocolate hecho a mano. La varita. Un libro. Sus notas. Incluso una camisa. Y suéter Weasley con las iniciales F Y D. Tenia muchos desbordes y ataduras mal hechas pero era perfecto para el.

Habia fotos muggles, fotos mágicas. Cartas secretas incluso el muñeco de nieve conservado en una esfera que nevaba.

-Ten fe

-Estas seguro?

-sip

Draco respiro y se dejo caer de la escoba tenía miedo, pero cuando ya veía el golpe Cedric lo atrapó

-Te lo dije, nunca e dejaría caer.

Draco sonrió y descendieron juntos.

-Tengo algo para ti

-Asi?

-Esta es la primera Snitch que atrape.

Draco asintió mirándola con detenimiento.

-Quiero darte la.

-Pero tiene un valor especial para ti.

-Por eso es tuya, vales mucho más, te quiero mucho, y es el mejor regalo que viene de mi corazón para ti.

Draco la tomo y observo entre sus dedos, volvió a sonreír y lo abrazo.

-La cuidaré muy bien.

-Yo se que si.

Aún guardaba la Snitch, también la capa de Cedric. Habia llorado mucho cuando el fallecio en el torneo, sufrío su perdida como si el suelo duro lo estuviera abandonando y cayera al vacia sin nada pero Fred estuvo con el.

En ese entonces miraba todo de forma distinta ahora... no tenía a alguien que le diera un soporte. No había estrellas para evitar que su mente fuera a esa oscuridad donde todo estaba a un paso del Suicidio.

suicidio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora