Ninguno de los dos volvió a tocar el tema del beso en todo el año. En sus cartas seguían plasmadas las mismas conversaciones de todos los días.
En el caso de Luca, preferia tratar ese tema cara a cara con el joven y Alberto... bueno, con todo eso de la pesca, las clases de natación que impartía a los niños y el nuevo empleo de medio tiempo que tenía reparando objetos, no podía pensar en otras cosas.Ellos lo sabían, era una tortura en incertidumbre el esperar tanto para dejar las cosas en claro uno con el otro, pero ¿Qué podían hacer?
-¡Felices vacaciones!- Todos los compañeros y amigos de Giulia y Luca se despedían. Ese era su último año juntos y luego, todos irían a Universidades diferentes y seguirían su propio camino.
-Hay que mantener el contacto chicos- indicaba una chica rubia mientras abrazaba a los dos a la vez.
-Suerte en su carrera- Esta vez fue el turno de otro castaño en hablarles, moviendo su mano en despedida.
-Gracias, igualmente- respondió Giulia.
Pablo tomó a su ahora novia por la cintura y dándole un beso tierno, le dijo: -¿Nos vamos amor?-
Después le dirigió la mirada a Luca, sin pronunciar palabra, el menor entendió.
-Los acompaño-Oh si, casi lo olvidaba.
Giulia había presentado a Pablo a su madre hace unas semanas y ahora que iban a Portorrosso para las vacaciones, el castaño sugirió llevarlo.
Ahora venía lo más difícil, presentarlo a su padre y hermano.🍃🪁🌬
El aire caliente del ambiente golpeó sus mejillas, al bajar del tren percibió una ligera irregularidad, ¿Hacia más calor de lo normal o solo eran sus nervios por volver a verlo?
-Oh papá- Giulia fue la primera en bajar del vagón.
-Mi hermosa niña-
-Buenas tardes Señor Marcovaldo- saludó Luca.
- Ragazzo, tantos años y aún no te acostumbras a decirme Massimo-
-Lo siento Señor, digo Massimo-
El hombre atrapó a Luca y a Giulia con su brazo izquierdo, o bueno...el único que tenía, dándoles la bienvenida.
El momento hubiese durado más, de no ser porque la peliroja recordó un aspecto sumamente importante.
-Papa- corrió a tomar la mano de un chico y como un rayo, traerlo hasta el mayor. -Quiero presentarte a alguien-Las palabras pronunciadas por la hija de Massimo fueron a mil por hora, como reflejo de la ansiedad que la situación le daba.
A pesar de ello, su padre entendió cada palabra; y su expresión cambió drástica al ver al nuevo joven.-Massimo, un gusto conocerle. Mi nombre es Pablo- extendió su mano para saludar al hombre. -Soy el novio de su hija-
Massimo quedó unos segundos sin moverse y sin decir una palabra.
Pablo tragó saliva y sujetó su mano derecha, ya que esta comenzaba a temblar levemente.
-Tu dime "Señor Marcovaldo"- dijo, para estrechar sus manos.
Luca juró que escuchó los huesos de Pablo crujir de lo fuerte que el otro la tomó.
"Para tener un solo brazo, su agarre tenía potencia", pensaba Pablo.Luca olvidó por completo la escena al percatarse de que cierto chico no llegó a recibirlo.
-Massimo, ¿Ha visto a Alberto?-
El hombre soltó al pelinegro para dirigir su atención al castaño.
-Claro. Perdona que no pudo llegar, pero tenía mucho trabajo que hacer- se excusó. -Dijo que terminaría lo más rápido posible y vendría, pero llegaste antes-
-Entiendo-
-Que tal si te adelantas tu y le das la sorpresa, ¿Eh?-El sonido de las herramientas siendo colocadas en su caja podía oírse desde el otro lado de la puerta. Luca corroboró lo que el padre de Giulia le había dicho; ya más tranquilo, entró al patio trasero de la casa encontrándose con un Alberto guardando todo su desastre.
Hechó un vistazo por el lugar, notando que había reparado una licuadora, una bicicleta y...lo que sea que estuviese escondido bajo esa manta blanca.
Sabía que Alberto tenía dotes para la construcción, pero no se imaginó que se animaría a hacerlo en su tiempo libre.
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○° Piacere, Girolamo Trombetta •●
Fanfiction-Es una tradición humana. Soy prácticamente un experto- -¿Y qué significa?- -.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.- Donde Luca y Alberto se reencuentran todos los veranos. Ahí comparten diferentes situaciones, mediante pasa el tiempo. ...