Desearía meter mi alma en ti, en este momento.
---
-¿Me dices que quiere follarte? -.
-Si -.
-¿Pero que no lo hizo en ese momento? -.
-Si -.
-¿Y no te frustra? -.
-Si -.
-Que jodido, amiga -.
-Lo sé, Hermione, gracias por recordarme la situación tan jodida que tengo -.
-De nada, para eso estoy, amiga -.
El desayuno, después de la noche tan atrevida con Draco. No, lastimosamente no hicimos nada, sé que el quería, yo quería... Pero, no hasta que "Aprenda que no es cualquiera".
Claro que es cualquiera, es cualquier chico egocéntrico, rico, sangre pura, Slytherin... Perfecto, no es cualquiera. Mi mestizaje me hace ver como una basura a lado de él, no le pido que nos casemos, pero que mierda haría conmigo, exacto, solo me haría una mierda emocionalmente.
¿Por qué fui una Mortífaga? Lord Voldemort era mestizo, pero que mierda. La mayoría de los Mortífagos eran sangre pura, excepto Snape...
-Déjame decirte, no te ilusiones con Malfoy, Rose... Eres bella, pero mereces más que un tipo egocéntrico como él -.
-¿A quien llamas egocéntrico?- La voz de Draco sonó detrás de nosotras, Hermione dejo caer su vaso de jugo de calabaza, mientras yo deseaba asesinarla por hablar de más sabiendo que estábamos desayunando.
-Se suponme que eres la más lista, Hermione -.
-Lo siento Rose, ya me voy. Tengo que ir, a-a biblioteca ¡si! -.
Hermione salía de su asiento sin mirar a Draco y se fue apresuradamente a biblioteca, mientras deseaba que se tropezara con Pevees.
-Entonces... -.
-¿Crees que no soy lo suficiente para ti? -.
-Malfoy, no somos nada -.
-Pero podríamos serlo -.
-Cuándo trates a los elfos como iguales y no como esclavos -.
-Es un trato, pero no seré yo quien te lo pida -.
-No lo estoy pidiendo que lo hagas -.
-Haré que me ruegues por que te pida que seas mía -.
-Púdrete -.
Las conversaciones con Draco eran lo más absurdo, ¿rogarle? No, no soy idiota... Bueno, lo soy, pero tengo cariño propio, jamás seré así.
Creo que soy idiota, sé que si le rogaría a Draco. Rogaría por que me dijera que ama follarme, que ama mi piel... Desearía ser lo mejor para él. ¿Soy idiota?
Si mi vida fuese un libro se debería llamar la vida de una idiota. Tonta, tonta, deja de pensar en él. En sus manos, su cabello, su piel pálida y perfecta, mierda.
-Señorita Hewman -.
Mierda...
-¡Llega tarde! ¡Como siempre! -.
-Lo lamento profesor Flitwick, yo -.
-Nada de excusas, veinte puntos menos a Gryffindor- Me gane las miradas de mi amiga, sus amigos y los demás chicos de Hufflepuff- Ahora, siéntese -.
Me senté junto a Harry, el gran Harry Potter. Él idiota que me lanzo diez metros volando en la segunda guerra mágica.
-¿Aún te duele tu trasero? -.
-Jodete -.
Estábamos en la ultima mesa de la segunda fila, frente a nosotros estaban Herb Wildelton y Franck Leviw, dos chicos de Hufflepuff extremadamente guapos, pero sin ninguna pizca de inteligencia.
El profesor más pequeño que he visto en mi vida comenzó a hablar.
-Encantamientos, aburrido ¿eh? -.
-¿Por qué me hablas? digo, intente matarte -.
-Muchos lo intentaron, pero aquí sigo -.
-Entonces sigue callado -.
-Rose... Vamos, todos merecen una segunda oportunidad -.
-¿Y tú me la estas dando?- Me cruce de brazos esperando a que respondiera, este trago saliva, claro al creer que él por ser quien derroto a Lord Voldemort más de una vez tenía el derecho de ser quien daba las segundas oportunidades- escúchame bien Harry, sigue masturbando tu maldito pene pensando en mí, no me importa. Pero quien necesita una segunda oportunidad eres tú -.
Las palabras del profesor desaparecieron cuando la puerta se escucho abrirse de un gran portazo.
-¡Deja de hablarle, Potter! -.
-¡Señor Malfoy!- La voz del profesor resonó en toda el aula- Menos 200 puntos a Slytherin -.
-Lo lamento profesor, pero necesito llevarme a Rose -.
-¡Rose! No vuelvas y tienes doble tarea, la señorita Granger le dará sus deberes -.
Tome mis cosas y salí del aula cabizbaja, era una mierda que por culpa de Draco me sacarán de una clase, a la cual, llegue tarde.
Comencé a caminar ignorando cualquier presencia de Draco, su estúpido aroma a caro era inevitable, pero no había nada que me pudiese hacerlo ver.
-Rose- Comencé a escuchar su caminar detrás de mí.
-Rose- Camine más de prisa sin querer mirarlo, lo odiaba en ese maldito momento.
-¡Rose!-
Me tomo de la mano haciéndome mirarlo, con su otra mano llena de anillos la poso sobre mi cuello, me pego a una pared detrás de una estatua de una bruja encorvada, e inevitablemente lo bese.
Él siguió con el beso, mientras comenzaba a ser despacio este se acelero de una manera muy practica, beso mi cuello, jadeábamos ambos, me hizo soltar pequeños gemidos mientras mis manos se posaban sobre su cabello queriendo revolverlo y este tomaba mi cadera acercándome más y más a él hasta que nuestros cuerpos solo chocaban entre sí, deseando estar unidos.
Draco saco su varita dio unos pequeños golpes en el lomo de la bruja e hizo un hechizo: Dissendio. Y se abrió un pasadizo secreto.
-¿Cómo? -.
-Le robe a Potter su mapa merodeador -.
No sabía que era eso, pero al parecer mostraba los pasadizos.
-Draco- Dije mientras se cerraba el pasadizo- Dijiste que -.
-Se lo que dije, pero no lo entiendes... No soporto saber que él idiota de Potter piensa en... En acostarse contigo mientras habla contigo -.
-¿Cómo leíste su mente...? No estabas en la clase, ni siquiera lo mirabas -.
-Pase frente al aula, soy el mejor usando legeremancia... Creí que te podía escuchar, pero, fue a él. Fue asqueroso -.
-¿Estas celoso?- Dicho esto Draco me miro a los ojos, me tomo de nuevo del cuello, su aliento rozaba mi mejilla izquierda, puso su otra mano en mi cintura acercándola a él y en un suave susurro me hablo.
-Lo único qué sé, en este momento es que desearía meter mi alma en ti, en este momento -.

ESTÁS LEYENDO
Little Wish; DM
Fanfiction𝙇𝙞𝙩𝙩𝙡𝙚 𝙒𝙞𝙨𝙝 | Rose, una chica nada inocente de la casa menos esperada donde salga una Mortífaga, una chica inteligente, sensual y nada usual. La chica del sexo delicado y pervertido. ¿Cuánto más tiene que rechazar? Los chicos son idiotas "...