¿Quieres terminar lo que empezamos?
---
Quería que lo hiciera, quería que me besara, que me tratase bien y mal al mismo tiempo. Terminar en su cama, diciendo su nombre. El como me trataba, tan solo pensarlo me hacía humedecerme.
-¿Me pedirás que te folle? -.
-Si lo hago ¿lo harás? -.
-Pídelo, y lo averiguaras -.
-Draco, follame -.
Su mano fría se hundió más en cuello, haciéndome soltar un pequeño gemido en el momento que hundió sus labios sobre los míos, pego más si cadera a él haciendo que mi pelvis sintiera su amigo. Mi capa que cubría la parte de mi pecho por estar abotonada cerca de mis clavículas fue sacada en un movimiento rápido de Draco, dejándome sin ella, solo con mi chaleco y camiseta libres.
Draco desfajo mi playera y metió su mano, paso por mi vientre y cuando localizo mi seno comenzó a subir lentamente rodeándolo con toda su mano. Al sentir mi pezón lo pellizco haciendo que soltara otro gemido un poco más fuerte.
-Quiero hacerte mía -.
-Quiero ser tuya, Draco...- Dije acercando mi boca cerca de su oreja, susurrando y dando un pequeño suspiro, este reacciono enseguida. Siguió besándome, tocando mis pechos, bese su cuello, masajeaba a su amigo encima de su ropa.
Pero antes de que pudiéramos proseguir a lo lejos escuchamos la voz de Filch, como todo un cascarrabias gritaba: ¡Salgan ahora! ¿Quién esta ahí? -.
Draco me susurro que nos fuéramos, saco su mapa y comenzó a caminar más dentro del túnel. Se podía ver el nombre del conserje en el mapa, acercándose a nosotros, Draco observo que había otro pasadizo y entro muy decidido dejando sin quien atrapar a Filch.
Parecía ser este la sala de Menesteres, la sala que solo aparece en el momento indicado, con lo necesario para quien lo necesite, este casualmente tenía un sillón grande, parecía muy cómodo y una frazada color jinda que combinaba con el sillón. Draco movió su varita y demasiadas velas se encendieron a plena oscuridad.
-Amo tener magia -.
-Lo sé, yo amo no ser muggle -.
Mis ropas estaban desordenadas, la camiseta suelta, la falda desordenada. Simplemente no me podía ver en absoluto bien.
-¿Quieres terminar lo que empezamos?- Dijo Draco acercándose a mí, tomo mis caderas con sus dos manos, y me acerco a él. Sus ojos fijos en mí, su mirada que iba hacía abajo y la mía hacía arriba, nuestras narices chocaban. Podría jurar que teníamos la altura perfecta para cada uno.
-¿Quieres que te lo pida de nuevo? -.
Me beso de nuevo, su mano sobre mi cadera, mi cintura, mi trasero, apretando fuerte. No dejaba de tocar mi trasero. Beso mi cuello, mi clavícula, bajaba más y más con sus labios, sus besos eran fuertes, sentía placer, algo que no podía sentir con nadie más.
Quito mi chaleco, desabotono mi playera, mi sostén estaba libre, Draco bajo las copas y comenzó a lamber mi pezón, me hacía sentir bien. Llegamos al sillón, Draco se sentó, se veía tan guapo, aún con su túnica abierta, y su playera blanca a la vista daba una visibilidad erótica.
-Arrodíllate -.
-¿Por qué lo haría? Sería mejor que lo hicieras tú -.
Me senté a su lado, aún mirándolo, este se levanto y se arrodillo frente a mí. Tomo mis rodillas y abrió mis piernas dejando a la vista mi braga.
-¿Con qué te gusta jugar rudo? -.
-Muéstrame como mejorar -.
Bajo mi braga cuidadosamente mientras me miraba, sus ojos penetraban mi alma, sus anillos me hacían sentir lo frío de la plata, y su piel estaba ardiente.
-Espero te guste -.
Draco levanto mi falta y metía su cabeza en ella, sentía nervios, su respiración en mi feminidad me hacía sentir escalofríos, tin tin, algo tocaba mi clítoris como si fuese un botón tan débil que merece ser cuidado con mil dragones.
Solté un gemido, sentí como su lengua rozo sobre este: ¿Te gusta, eh?, otro lengüetazo, sin piernas comenzaron a moverse ligeramente ante el placer que me daba Draco, tan pequeños lengüetazos que me gustaba, pero después de eso Draco comenzó más y más rápido, podía ver mi falda moverse por causa de su cabeza, de un lado a otro, de arriba hacía abajo. Me hacía soltar gemidos, tantos que no sabría si en algún momento pude llegar al orgasmo.
Un dedo, dos dedos, dentro dentro dentro, era rápido, las embestidas hacían que mis piernas temblaran, su pulgar frotaba mi clítoris, sentía que llegaría a mí clímax antes de lo que quisiera.
Draco se levanto y se sentó en el sillón, hizo un ademan para que me sentara frente a él. Cuando Subí encima de él, estaba a punto de meterlo cuando...
Clap clap
-Señorita Hewman, no esta permitido dormir en mi clase- La risa y la voz del profesor Binn sonó en todo el salón, Parvati, que estaba a mí lado me dejo dormir después de mi pelea con Draco en el pasillo, termine tan cansada de gritarle de que por su culpa me habían sacado de mi clase que la pelea fue casi a muerte.
-Lo lamento profesor... -
Malditos sueños calientes, Parvati me paso un pequeño pedazo de pergamino que decía:
-Vaya, susurrabas mucho el nombre de Draco. Te gusta tanto que ni peleados dejas de pensar en él.
-¿Alguien más me escucho?
-No, solo se dieron cuenta que dormías por que soltaste un bostezo
Mierda, no puede ser. Esto se sentía más real que nunca, sentía la lengua de Draco pasar por mi feminidad, podía sentir todo. Soy tan idiota.
-----------------------------------------------------------------------------
Voten, comenten y compartan;)

ESTÁS LEYENDO
Little Wish; DM
Fanfiction𝙇𝙞𝙩𝙩𝙡𝙚 𝙒𝙞𝙨𝙝 | Rose, una chica nada inocente de la casa menos esperada donde salga una Mortífaga, una chica inteligente, sensual y nada usual. La chica del sexo delicado y pervertido. ¿Cuánto más tiene que rechazar? Los chicos son idiotas "...