Retirarse

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"Ese día estabas temblando bajo la fría lluvia cuando toqué tu delgado hombro
Sigo recordando ese momento como si fuera ayer
Estoy llorando"
—Taemin, I'm Crying—




Apoyó sus manos el fornido pecho de su prometido, acarició sus tetillas con sus pulgares y se mordió los labios cuando sintió esos dedos subir por sus muslos hasta llegar a sus nalgas.

Zhan comenzó a gemir cuando sintió las manos de Yibo separar sus nalgas y empujar su polla más adentro, le fascinaba sentir como su prometido apretaba sus esfínteres alrededor de su carne, el doncel se inclinó y besó sus labios, introduciendo su lengua en él, jugando con la suya.

El miembro de Zhan rozaba el abdomen del mayor, sus cuerpos estaban sudados, por lo que el cabello de Xiao se pegó a su frente haciéndolo ver malditamente sexy.

—Detente Xiao Zhan.—pidió Yibo con un gruñido al sentir que su prometido aumentaba su ritmo, subiendo y bajando a la vez que gemía más fuerte.

—¡No! No me voy a de-detener.

El peli negro se volvió a inclinar, esta vez para morder los labios de Yibo, quien hizo lo mismo, sujetó con fuerza la cintura de Bastz e invirtió la posición, colocó a Xiao de lado, haciendo que le diera la espalda, el menor inclinó su trasero hacía atrás haciendo reír a su pareja, quien sin aguantar más le levantó un poco una pierna y guió su miembro hasta su entrada, dejando  escapar el aire cuando sintió como el cuerpo de su prometido lo recibía.

Sujetó una mano a la cintura de Zhan y entró y salió sin apartar su mirada del culo blanco de su prometido, la imagen era muy erótica, demasiada perfecta, no aguantaría mucho más, y sabia que Xiao tampoco lo haría, se acercó más a él para apoyar su frente en la nuca de su amante y con su otra mano tomó el pene del menor y comenzó a acariciarlo, aumentó su ritmo sintiéndose al borde del orgasmo.

Cerró sus ojos cuando sintió a Zhan acabar primero, siguió acariciando el pene de su pareja cuando acabó en su interior, empujó hacia adentro  y volvió a mirar el culo de su pareja, le encantó ver que cuando sacaba su miembro su esperma quedaba dentro de su prometido y como salía un poco, le hacía sentir que lo marcaba de aquella manera.

—Eres mío, no olvides eso.

Xiao asintió suavemente mientras sonreía a medias, tenía mucho sueño, el orgasmos lo había dejado agotado, y atribuyó eso a su embarazo, porque quizás en otro momento habría pedido segunda tanda, Yibo lo abrazó y se quedó dormido a su lado, disfrutaría de aquello, porque no sabía cuando volverían a hacer el amor o dormir juntos, porque pronto comenzarían la casería.

A la mañana siguiente alguien tocó sus puertas, Yibo fue quien abrió, aún tenía sueño, no había podido dormir bien ya que Zhan habia pasado la noche entera moviéndose, culpó el embarazo porque no era la primera vez que dormían juntos y Xiao no se movía, sin embargo esa noche fue la excepción.

—ZheHan ¿Qué haces aquí?.—preguntó Yibo al ver al castaño allí.

—Vengo a buscar a Zhan, quedamos en que pasaremos el día juntos, además tengo algunas cosas que decirle, eso le dije la última vez que hablamos por teléfono.

—El aún duerme, no quiero despertarlo...

ZheHan ladeó su cabeza y rodó los ojos, Yibo miró hacia atrás y se sobresaltó.

—¡Carajo! Zhan me acabas de asustar.—se quejó Yibo.

El doncel estaba detrás de Yibo, muy cerca, en su cabeza estaba apoyada una almohada y él estaba envuelto en las sábanas blancas de la cama, y por eso Wang se llevó un susto de muerte.

Contiendas del Corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora