Bueno, no exageremos, realmente no siento nada más que la necesidad de escribirte.
El tiempo ha pasado rápido y yo aún quiero mucho a la idea de tí.
Estoy anclada a esa idea, no voy a mentir.
Y aunque tengo claro lo que sentía, eso no impide que vivas en mis sueños y que te folle de mil maneras en ellos.
Fuimos bonitos, eres bonito y es bonito recordarte, como de costumbre te agradezco la oportunidad y te odio por haber llegado en el momento equivocado.
Y así de la forma más breve, cutre y encima tarde te digo...
Feliz Aniversario.
Recordemos que escribo mierda, pero que me pertenece.
