Corría como una alocada hacia mi avión por los pasillos del aeropuerto, solo faltaban 15 minutos para coger el vuelo. Por suerte, llegué a tiempo y poco tiempo después estaba sentada en el avión rumbo a Alemania.
En el avión me aburrí bastante, hasta que una chica vestida entera de rosa, hasta su pelo, se sentó a mi lado.
- Hello ¿What is your name? - le pregunté en inglés por si no sabía castellano.
- Uf, ingleses que asco - dijo la chica descaradamente.
- No soy inglesa y aunque lo fuera no me tendrías que hablar así.
- Ag me da igual niñita - me dijo la chica.
- Me llamo Lilian pero me puedes llamar Lily.
- Uf, ¿No me has escuchado? Me das igual - me contestó - Y por si lo preguntas me llamo Katherin.
- Oky.
- ¡Cállate!.
Como la chica era muy grosera, no le volví a hablar en todo el vuelo.
Una hora más tarde llegamos y cuando salí del avión una familia estaba gritando mi nombre. Eran una señora, un señor y un chico dos años más mayor que yo que sería su hijo.
- LILIAN, LILIAN - gritaba la familia.
Yo me dirigí hacia esa familia, esa era mi familia de intercambio. Cuando me los alcancé, me dijeron sonrientes:
- Lilian, somos tu familia de acogida, yo me llamo Elisa, mi marido se llama George y nuestro hijo Daniel. - me dijo la señora. - Ahora seremos tu familia, nos puedes llamar mamá, papá y hermano si quieres.
- O gracias. - le contesté - Estoy muy contenta de que mi familia de acogida sea tan amable.
- Aaaa, no es nada. - respondió Elisa.
- Ya - dijo Daniel con una sonrisa.
Yo me fijé mejor en ellos, Elisa era alta, rubia y de ojos azul mar, George tenía los ojos marrones y pelo marrón y Daniel tenía ojos marrón chocolate y el pelo marrón.
Poco tiempo después, ya habíamos cogido mi maleta y nos ya estaba en mi habitación poniéndome mi pijama de unicornio. A continuación, hablé un poco con Daniel y descubrí que aparte de ser una persona muy amable y respetuosa, también jugaba al fútbol.
Después de cenar pescado con patatas, cada uno se fue a su habitación a dormir.
Al día siguiente, me desperté a las 06:00 de la mañana, para llegar pronto a la universidad, (Ains, qué emoción), después de desayunar, cogí mi mochila y salí de la casa, rumbo a la universidad. Mientras andaba, me choque contra una de las chicas que tenía delante.
- Uy, perdón. - dijo una chica de mi misma edad.
- No pasa nada - dije yo tímidamente.
- ¿Cómo te llamas? - me dijo la otra chica.
- Lilian, pero me suelen llamar Lily.
- Ella Ilargi - dijo una de las chicas señalando a la chica que tenía gafas - Y yo Amy.
Las tres recogimos mis libros y nos dirigimos juntas hacia la universidad, ya que también Amy y Ilargi iban a la misma universidad que yo.
Hablamos todo el camino que faltaba y entramos nerviosas las tres por la puerta de la majestuosa universidad de Tréveris.
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Una extraña casualidad
Teen FictionLilian, Amy e Ilargi son tres chicas que el destino ha juntado en una extraña universidad de Alemania. En ella se dan cuenta de que algo extraño está pasando con los compañeros y los profesores de la universidad. Una aventura, muchos misterios, una...