:
:
Boruto logró abrir la caja de seguridad y comenzó a sacar todo de ahí y lo colocó en su mochila.
Sarada le miró interesada —Esos papeles son pruebas… Me los vas a entregar después ¿No?
Boruto le miró mientras se ajustaba la gorra —Yo también necesito de estas pruebas —le sonrió —Hagamos algo… hay que trabajar juntos, yo me llevaré las pruebas y puedes venir conmigo para revisarlas.
La pelinegra se cruzó de brazos y le observó con recelo —No lo sé…
—¿No confías en mí? Incluso te puedo ayudar. Además, tener estas pruebas contigo te pueden poner en riesgo.
Sarada soltó un suspiro —Bien, pensándolo bien… no quiero arriesgarme a perder estos papeles.
Boruto avanzó hasta ella y la tomó del brazo con suavidad —Entonces vámonos.
Ella asintió y ambos se encaminaron a la sala en donde apenas entraron, se encontraron con el cuerpo inconsciente de Haruki.
Sarada posó su atención en él —¿Qué haremos con él? Es un testigo.
De pronto alguien tocó a la puerta y Boruto la miró —Descuida, tengo a alguien de confianza que se hará cargo de sacarlo de aquí.
El rubio se dirigió a la puerta y la abrió dejando pasar un tipo con vestimenta bastante formal.
—Sebastián, es él.
El pelinegro asintió —Bien, por ahora les sugiero que salgan de aquí. Es posible que alguien venga a buscarlo.
Boruto asintió y guió a Sarada a la salida, quien decidió no mediar palabra alguna. Una vez fuera del edificio, Boruto la miró —¿En qué has venido?
—En Bus.
—Te llevaré entonces —dijo mientras la tomaba de la mano sin previo aviso y la conducía a su auto estacionado a unas cuadras de aquél barrio peligroso por lo que tendrían que caminar entre un tumulto de gente. En esos momentos Boruto era consciente del trabajo de Sarada, hace poco se esta se había convertido en fiscal y él mejor que nadie sabía los riesgos que esa profesión tenía en esa época en la que vivían en donde los pocos fiscales incorruptibles que buscaban la verdad por sobre todas las cosas para hacer justicia, era amenazados y asesinados por Akatsuki y ella le había demostrado en esos momentos, lo enserio que se tomaba su trabajo al grado de ir completamente sola a un lugar como ese en donde incluso él mantenía cuidado.
Mientras conducía, Boruto le miró de soslayo —De verdad me sorprendiste —dijo con una sonrisa pero casi de inmediato, su sonrisa se desvaneció —Y también me asustaste.
Sarada volteó a verle con sorpresa por aquél cambio tan repentino —No entiendo.
—Digo que… no esperaba que fuera a encontrarte en un lugar como ese y… de solo pensar que te expusiste de tal forma me asusté. No vuelvas a hacerlo.
La pelinegra boqueó —¿Estás regañándome? Solo hacía mi trabajo.
El rubio le dio una mirad rápida —Acepto que eres valiente pero, eso a veces se vuelve una desventaja. Debes prometerme que cuando tengas planeado ir sola a algún lugar me avisarás y yo te acompañaré.
—Boruto… —ella no sabía que decir —¿Tanto te importo? A pesar de que nos conocemos hace unos meses…
—Me importas Sarada —dijo sin apartar la mirada del frente y ella comenzó a ponerse nerviosa.

ESTÁS LEYENDO
"Mi deber, Protegerte..." #Naruhina y BoruSara
Fiksi PenggemarEn una época en la que el terrorismo, la delincuencia y la Ley están en Inicios de una Guerra por el poder absoluto, un joven guerrero que lucha por la paz y el amor... Luego de que Naruto echara de su vida a Hinata con un hijo en su interior dudand...