No puede ser ahora

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Izuku

-Kirishima- Lo llamé, me estaba irritando que vea a mi omega de esa manera, poco mas y se le caía la baba.

- A mi es a quien tienes que mirar- Mi cara notaba una expresión nada agradable para el que la viera. Menos mal que Katsuki no me estaba viendo. El pelirrojo al notar mi expresión, se tensó y agacho la cabeza.

-Lo s-siento señor, digame que necesita. -Me dijo el pelirrojo mirando de reojo al pelicenizo. No voy aguantar mas esto.
-Muestrale a Katsuki toda la casa y hazle saber cual es su habitación. Luego de eso buscame en mi habitación Eijiro. Tengo un par de cosas que decirte.

Me di vuelta y mire al confundido omega de ojos rojos y le dedique una mirada seria. Pero no me resistí y luego le revolví el cabello puntiagudo. El sólo se quejó chasqueando la lengua con un rubor en las mejillas. Y así los deje solos, pobre de Kirishima si se arriesga a mirar con otros ojos a mi omega. Aunque le tenga cariño, nadie toca lo que es mío.

Katsuki

-Katsuki no?- Me dijo el trabajador de Izuku, al parecer estaba en lo correcto respecto al uniforme, ya que este vestía una chaqueta negra y un pantalón algo holgado de color negro, como la de cara redonda.

- Si Katsuki, y vos sos Kirishima. Tan grande es esta casa que me tienen que acompañar?- Le dije con cara seria, no me había levantado hace mas de 1h pero ya me estaba cansando.

-No es una casa Katsuki, es la mansión de uno de los mafiosos mas peligrosos de todo Japón. No esperabas una simple casa o si?, ademas todos sus subordinados vivimos aquí.- Me decía sin mirarme, el alfa que, por cierto, era de cabellera larga y rojiza al igual que sus ojos.

-Si aja, y por qué visten de esta manera? No se parece a como los subordinados de un mafioso se vistirían. Me los imagino con traje y toda esa mierda.

-Solo dos en toda la mansión visten con traje. Son los de alto rango, los que llevan mas tiempo y le brindan mas confianza al jefe Midoriya.- Dijo el pelirrojo dibujando una sonrisa en su rostro. Me miró y se sonrojó, que le pasaba a este chico, ni siquiera dije algo.

-Vamos que te muestro tu habitacion Katsuki.
Kirishima le mostró todas las habitaciones y salas de la gran mansión, incluyendo una que no tiene permitido entrar, a esa habitación solo pueden entrar los subordinados de alto rango, esa es la habitación de Midoriya Izuku. Eso le llamó la atención ¿Por qué carajo no podía entrar en la habitación de ese inútil?

-Bueno ya te dejo tranquilo- me mostro una leve sonrisa- en el armario tienes ropa, para distintas ocasiones, que el jefe mando a comprar. Si necesitas algo no dudes en llamarme. Adiós!!

-Que alfa mas raro. Uaaaah- bostecé- necesito descansar, este recorrido tardo mas de lo que esperaba.
Dormiré una siesta.

Izuku

Luego de esa escena con Eijiro, me fuí a mi cuarto, era un zona de paz pero a la vez le tenía algo de odio. Tenía mi jacuzzi, mi gran y comoda cama y el maldito escritorio donde trabajo.
Por alguna razón odio que entren a mi habitación. Solo dos personas tienen permitido entrar sin consultarme antes, estos son como mis hermanos, estuvieron conmigo desde que empecé y no encuentro situación en la cual no pueda confiar en ellos. Se que nunca me traicionarían. Estos son Iida Tenya y Todoroki Shoto. Un beta y un alfa que se ganaron mi completa confianza hace ya varios años.
Luego de una ducha, me puse una camisa azul, desabrochada en los pectorales y un pantalon de vestir negro con un cinturon del mismo color. Me puse los anteojos y me sumergí en el papeleo, dejando pasar a Iida. Este siempre de coloca a un lado de la puerta, para responder por el alfa peliverde, si es este esta ocupado.

El Omega de la Mafia (Dekukatsu Omegaverse) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora