Un lindo omega de cabellos rubios se despertaba debido a los rayos solares que entraban por el gran ventanal.
Se acomodo y sentó en la suave cama, y con ambas manos restregó sus ojos pudiendo notar algo extraño.
Al parecer, el alfa de revoltosos cabellos verdes, no se encontraba a su lado. Estaba acostumbrandose a amanecer abrazado a su alfa, pero esta vez, el otro no estaba. Apoyó su mano en donde antes dormía el alfa y notó que aún estaba algo tibia. Eso solo significaba que el peliverde se había levantado hace relativamente poco.
Pero Katsuki no se había dado cuenta de algo mucho más importante.
Cuando se quiso levantar de la cama, el de ojos rojos se percató de las pequeñas gotas de sangre que iban formando un camino que empezaba en la cama y terminaba en la puerta del baño.-¿Qué carajo?- Dijo el omega, un tanto asustado. Lentamente abrió la puerta y se encontro con el tallado cuerpo de su alfa. Este se encontraba casi desnudo, de no ser por el bóxer que no dejaba ver su dotada intimidad.
-D-Deku- Dijo el rubio mirando su musculatura, falataba poco para que se cayera la saliva de la comisura de sus labios. Dejando de lado esos pensamientos impuros, se dio cuenta que el más grande poseía unos cuantos papeles llenos de sangre.
-H-Hola Kacchan! Cómo dormiste?
-Ey, que te pasa Deku?- Preguntó asustado mientras se acercaba pero fue interrumpido por el alfa.
-Nada nada, sólo me salía sangre de la nariz. Nada importante, tranquilo.- Decía el de ojos verdes con una mirada tierna pero algo nerviosa.
-Mm- dudaba el omega- Esta bien como digas.- Terminó de entrar al baño y se dirigió directamente hacia el lavabo, para así lavarse sus dientes y cara.
También utilizó cremas, ya que no podía dejar que salieran arrugas. Ya bastante tenía con su constante ceño fruncido, que al menos se preocupaba por que no le salieran arrugas en otras partes.
Agarró la toalla y se la resfregó por la cara, y antes de terminar sintió unos fuertes brazos abrazar y acariciar su estrecha cintura. Al mismo tiempo, sintió el mentón del alfa ser apoyado en su hombro.-Mmmn Kacchan, me encanta tu olor- Soltó el mas grande inhalando profundamente el aroma que poseía el cuello del omega. El peliverde acariciaba y apretaba cada zona del cuerpo de Katsuki, mientras que éste se dejaba. Ambos se estaban calentando.
-D-Deku...-Jadeaba el omega al sentir los besos y chupones que le dejaba el alfa en su cuello.
El pecoso estaba en el limbo, dejando besos y leves mordidas por todo el cuerpo del menor.
En una de esas posó una mano en el culo del omega y la otra la llevo a la erección del mismo.-Me encanta verte asi en el espejo Kacchan- El alfa tenía razon, estaban por tener sexo frente al espejo. El baño realemente tenía un gran espejo, y nada mejor que usarlo no?
El omega no podía tener la cara mas roja, en ese momento estaba viendo como tenía al alfa detras suyo masturbandolo y apoyando la ereccion en su culo.
-A-Ah D-Deku para- Intentaba el omega, pero era imposible, su placer no lo permitía, le encantaba como lo tocaba su alfa. Tenía las manos callosas y grandes pero de alguna manera, se sentía demasiado bien.
El alfa no podía esperar mas, escucharlo gemir a su omega lo sacaba de quicio.
No aguantó mas y se bajo el bóxer. El omega no pudo evitar mirar al espejo y notar el miembro erecto del alfa como pasaba por entre sus piernas.-A-ha- Gimió el omega al sentir el miembro rozar su entrada. Era vergonzoso verse de esa manera contra el espejo, pero estaba con tantas ganas que mando a la mierda la verguenza y tiro el cuello para atrás, dejando espacio para que su alfa le deje pequeños besos y mordidas. Ninguna fuerte como para dejar la marca de unión.
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El Omega de la Mafia (Dekukatsu Omegaverse)
RomanceBakugou Katsuki, un omega de 18 años, despierta en una habitación desconocida, en una habitación de un alfa que no conoce. Este alfa, Midoriya Izuku de 23 años, jefe de una de las mafias mas peligrosas de todo Japon, intenta conquistar a un omega b...