° DESPUÉS DE UNA VIDA °

21

A la mañana siguiente, los dos chicos despertaron con un dolor de cabeza insoportable.

- Jamás, óyeme bien, ¡Jamás! Volveré a salir con ustedes a tomar - Dijo Jiang Cheng mientras se preparaba un café.

- Pero... A-Cheng... - Se quejaba Wei Ying - Nos divertimos ayer.

Jiang Cheng rodó los ojos mientras tomaba un sorbo de su café - El que tuvo mucha más diversión fue Huaisang - Ambos se miraron.

Si bien era cierto que Huaisang era el más tranquilo de los tres, ayer se descontrolo por completo. No lo reconocían.

- Supongo que la presencia de Mingjue influyó en ello - Dijo Wei Ying - Me pareció un buen tipo ¿No crees?

Cheng asintió.
Era muy cierto que su pequeño amigo no solía salir mucho de casa y siempre se mantenía en el trabajo, pero desde que está saliendo con Mingjue cambió. Ahora está mucho más animado y se le ve sonreír con muchísima más frecuencia, y eso era suficiente para que Wei Ying y Jiang Cheng lo aceptarán.

- No es malo con él y lo hace feliz - Cheng se sentó al lado de su hermano - Además de que su padre lo aceptará sin dudarlo.

Ambos chicos rieron ante el comentario de Jiang Cheng. Estaban felices de que su amigo encontrara a alguien que lo haga sentir en paz, lo cual casi nunca sucedía, pues Huaisang era un manojo de nervios.

- Oye, hoy debemos ir al museo, pero no creo que Huaisang tenga fuerzas para levantarse - Dijo Wuxian mientras sonreía pícaramente.

- Mhn... Tienes razón. ¿Llevamos a alguien más? - Dijo Jiang Cheng sin seguirle el juego a su hermano, haciendo que este hiciera un puchero.

- Llamaré a un amigo - Jiang Cheng lo miró, pues conocía muy bien la clase de "amigos" que tenía Wei Ying - Es buena gente. ¡Tú lo conoces! Es el mochito - Dijo Wei Ying mientras señalaba su dedo meñique y comenzaba a moverlo.

- Por favor... Deja de llamarlo así - Dijo Jiang Cheng mientras se aguantaba la risa.

º º º

Xichen había llegado al mismo restaurante que fue el día anterior, pues ahí es donde se encontraría con Xingchen. El mayor se quedo esperando por mucho tiempo, pero su amigo no llegaba, así que lo llamó.

- ¿Dónde rayos estás, Xiao?

- Em... Si te soy sincero, no tengo ni idea.

- ¿Disculpa? 

Xichen no podía entender como es que su amigo llegaba a ser tan despistado, pues le contó que había tomado el bus que le dijo para poder llegar al restaurante, pero al parecer se había quedado dormido y sus lentes terminaron por caerse y romperse, lo cual fue un impedimento para saber cual era su paradero e hizo que que se pasara unas cuantas estaciones.

Xichen suspiró - Xingchen... ¿Le has preguntado a alguien el nombre de la calle?

- Me da miedo hablarle a alguien por esta zona. Siento que me metí en la boca del lobo.

- ¡Pierde ese miedo y pregúntale  a alguien! - Dijo Xichen - Te mandaré un taxi, pero necesito la dirección.

Xingchen suspiró - ¿Y si mejor te envío mi ubicación?

- Como quieras, pero hazlo rápido. - Dijo Xichen antes de cortar.

Esta no era la primera vez que se perdía, pues se le suelen romper fácilmente los lentes y nunca lleva los de repuesto, así que Xichen ya se había acostumbrado, pero aún así temía por la seguridad de su amigo. Un mensaje lo sacó de sus pensamientos, Xingchen ya le había mandado su ubicación junto con la dirección de una veterinaria.