° DESPUÉS DE UNA VIDA °

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- No.

- ¿No? ¿Acaso no era lo que quería?

Xichen se quedó en silencio. 
El consejo médico del hospital Gusu había aceptado por fin a financiar su viaje a Estados unidos para que su estudio sobre neurocirugía fuera completado, pero Xichen sabía la razón del porque lo habían aceptado. Su tío había intervenido.
Era muy raro que después de lo que sucedió con el matrimonio y la conversación con su tío, todo esté yendo relativamente bien en la carrera de Xichen.

- Necesito más tiempo. - Dijo - Debo arreglar muchas cosas en mi vida personal.

- Doctor Lan. - Dijo el presidente del consejo. - Ni a nosotros ni a la medicina nos importa su vida personal. Lo que le estamos dando es una oportunidad que lo hará triunfar en su carrera, y se la damos porque creemos en que usted es capaz de completar aquel estudio. - El presidente agarró los archivos que tenía en el gran escritorio donde se encontraban los cinco miembros. - Como ya antes se le mencionó, el boleto de avión ya está comprado y es en dos días. Espero que sepa que es lo mejor para su futuro. 

Aquel médico se retiró de la sala del consejo siendo seguido por los otros cuatro.
Xichen se quedó sentado en silencio evaluando sus opciones. Si bien era cierto que esta era una oportunidad en un millón, no podía dejar a Jiang Cheng en la situación en la que están ahora. Además de que no se iría por unas cuantas semanas, la investigación de su estudio podría durar meses y estaba seguro que Cheng no iba a dejar todo lo que estaba logrando solo para acompañarlo. Eso sería muy egoísta de su parte. También se encontraba el tema de su tío, sabía que si él se iba, no iría solo. Ambos, Guangshan y Qiren, no se quedarían tranquilos e inventarían alguna excusa para que Guangyao lo acompañara y se pueda formalizar el matrimonio. 

Xichen suspiró, eran muchas cosas en las que pensar y tenía muy poco tiempo. Decidió ir a lo primero, así que llamó a Cheng.

Quedaron en reunirse cuando acabara la jornada laboral de Xichen, así que se reunieron cerca de las 23:00 h. en un parque que estaba cerca de la casa de los Jiang.

Xichen lo comentó todo a Jiang Cheng y él solo se quedó en silencio pensando. Ninguno de los dos sabía o que pasaba en la cabeza del otro, pero sabían que no querían separarse.

- Bien. - Rompió el silencio Cheng - No estamos en la época antigua, tenemos manera de comunicarnos. - Dijo - Además no quiero que te pierdas esta gran oportunidad en tu carrera por mi culpa. 

- Sí, pero...

- No. - Lo interrumpió. - Sé que te sientes preocupado por Guangyao, pero confío en ti. Sé que nunca harías algo que me lastimara.

Xichen no sabía que decir, así que solo abrazó a Jiang Cheng y dijo "Gracias". Este abrazo se convirtió en un beso, y ese beso en pequeños piquitos. Ambos estaban felices aunque estuvieran a solo unas cuantas horas de separarse por tiempo indefinido.

- Te llamaré siempre que pueda, pero todos los días verás un mensaje mío. - Dijo Xichen abrazando aún más fuerte a Cheng.

- Más te vale. - Jiang Cheng se separó del agarre - Porque te aseguro que no querrás verme enfadado.

Esa noche ambos se quedaron conversando hasta altas horas de la madrugada. Fue la primera noche que pasaron juntos, y ambos esperaban que no fuese la última.

Al llegar la tarde del siguiente día, Xichen ya debía irse así que fue hacia el aeropuerto, pero no iba solo. Wangji, Wei Ying y Jiang Cheng iban con él en el mismo auto.

- ¿No te olvidas de nada? - Le repitió Jiang Cheng por quinta vez.

- Estoy seguro que empaqué todo lo necesario e indispensable.