~at your services my ledy~(Hanako-kun x tu)

>.< los seres molestos>.<

Aquel recuerdo, de hanako-san y la morena, llegaba, así viendo que la pequeña niña ahora era el asistente de un ente.

Por pedir un deseo su vida cambio por completo.

Kaite puso sus manos juntas, en forma de súplica, para que aquel pelinegro la dejara irse.

- hanako-san, Hanako-san,¡Por favor déjame ir!

- ¡no!- salió de el cubículo, haciendo sus manos en forma de equis-

- ¡porfabor ya me quiero ir!-suspiro y lo miro aún con el puchero en la cara- tengo una cita.. muy importante, no puedo faltar....

- ¿que tipo de "cita"?

- una cita la cual no deberías ponerle importancia.

- igual. No puedes ir.

- hanako-san.... Porfavor....

- parece que estrañas tu pecera.

- ¡oh mira me de la nada me encanta limpiar!- frunció su ceño con una sonrisa forzada para después apretar más la escoba-

- sabes....- vio a la morena agacharse para recojer unas cartas, para después tomar sus manos y ponerlas en la escoba y ponerse atrás- conmigo estarías mejor, que con tu cita.

- si me dieran a elegir entre ser un pez todo mi vida o estar contigo elijo ser un pez....

- vaya ya veo...- agarro la pecera y tiró un poco de agua en ella haciendo que la misma saliera corriendo- ¡¡Que mierda!!

- dijiste que quieres ser un pez.

- ¡hanako-san idiota!

>>.............<<

- aaaah...- suspiro y camino por los pasillos, con silencio, por ver qué estaban en clase, de la nada la puerta de uno se abrió.- oh... Velazquez.

- señor leo...

- que bueno que estás aquí.- sonrió- ¿podrías ayudarme con algo?

- si claro...

- bien.- salió completo de la habitación y fue directo con el maestro a una bodega.- que puedo ayudarlo señor leo.

- vamos dime leo sensei.

- porque no soy su alumana.

- igual me siento más cómodo que me digan así.- le dió una caja, para después poner varios material en la caja- se me acabaron los materiales.- la miro y vio los pequeños rasguños y vendas en su cuerpo - ¿Velazquez... Porque tienes eso?

- hum?.... Es que me cai hace unos días.- arrugó su nariz ante recordar lá verdad-

- oh... Pero parecen heridas fuertes ¿Segura que estás bien?

- si leo sensei.

- bien..- miro la caja para luego verla- ¿y como estás con el señor yashiro?

- bien... Por cierto.- sonrió- me gustaría que me llamara Yashiro apartir de ahora

- ¿Yashiro kaite?- miro al techo para luego sonreír- suena hermoso.

- ¿hum? Si...

- ¿pero que te hizo cambiar de opinión?