¡YO TAMBIÉN TE QUIERO, PRECIOSA!

CAPITULO DIECISIETE

Alvaro la recogió en su coche tal y como había dicho una hora mas tarde.
- Hola preciosa... - La saludo con un beso, le cogió la bolsa de viaje y la guardo en el maletero.
- Alvaro...¿Adonde vamos? - Pregunto ella sonriendo.
- ¿Te dije que era una sorpresa?
- Algo así.
- Sube... - Le dijo él. - ...tenemos una mesa reservada para comer.
- ¿No me vas a decir a donde vamos?
- Has confiado en mi... - Puso el motor en marcha. - ...has aceptado venir...sigue el juego.
- Pero tengo que decirle a mi padre donde voy. - Intento ella convencerlo.
- No cuela... - Sonrió él negando con la cabeza.
- Esta bien, tienes razón...
- Te daré una pista...vamos a la playa, ¿A ver si adivinas cual?
- Vale...

Durante casi todo el camino charlaron, bromearon y jugaron a las adivinanzas, aun que a mitad de trayecto Iris ya había deducido a donde iban.
- ¿Que hacemos aquí? ¿Donde vamos a pasar la noche?
- ¡Sorpresa,¿Recuerdas?!
- Esto ya es muy largo...dímelo de una vez.
- Mis padres tienen una casa aquí.
- Nooo...
- Siii... - se río él.
- Me has engañado. - Aparcó el coche en la plaza del pueblo.
- Creo... - Se acerco a ella. - ...que tu te has dejado engañar... - La beso. - ...muy a gusto.
- Eres un liante. - Le devolvió el beso.

Bajaron del coche y Alvaro cogiéndola de la mano la guio por la plaza hasta un pequeño restaurante.