¡YO TAMBIÉN TE QUIERO, PRECIOSA!

CAPITULO VEINTE

Las fotos, media hora después al igual que los vídeos estaban en instagram y otras redes sociales rodando entre todos los conocidos que disfrutaban, leían y añadían comentarios maliciosos.

Las fotos pronto llegaron al móvil de Alvaro. Cuando abrió su instagram y echo una ojeada a las novedades, allí estaban las mismas fotos subidas por diferentes personas. Iris abrazada a Raul. Iris riéndose con Raul. Raul cogiendo las manos de Iris. Raul dándole un beso a Iris. (En la cara). Iris y Raul saliendo juntos del bar cogidos de la mano y jugando.

Alvaro estuvo a punto de estampar su móvil contra la pared de su habitacion. Estaba furioso. Sus sospechas eran ciertas. Iris era tan mentirosa y falsa como todas.

Al día siguiente Alvaro evito a Iris durante todo el día. Seguía sintiéndose mal por lo que había descubierto de ella y temía la reacción que él pudiera tener hacia ella. Iris se comportaría como si fuera inocente cuando él sabia lo falsa que era.

A la noche, después de cenar ya no pudo evitar su encuentro con Iris. Lo cierto es que a pesar de lo evidentes que eran las fotos y los vídeos que había visto quería creer en ella, la quería y la deseaba.

Recogió a Iris a las once. La chica iba con pantalones cortos y una camiseta sexy de las que estaban de moda, no llevaba tacones altos y usaba un bolso pequeño de bandolera. Alvaro sonrió, la adoraba y algo se removió dentro de él cuando Iris lo saludo con un beso.
- Te he echado de menos mi niño... - Le sonrió ella.
- ¿De verdad? - Alvaro recordó las fotos. - No te creo...Seguro que has estado muy ocupada.
- Lo he intentado...pero, no dejo de pensar en ti.
- Eso lo hago yo muy bien, ¿Sabes? - La empujo hacia el coche.
- ¿A donde vamos?
- Hemos quedado en el bar de siempre...Creo que vamos a la disco de La Malva...
- Me gusta...la ultima vez me lo pase muy bien allí... - Comento ella mientras subía al coche. Alvaro la miro y la pico.
- ¿Me estas provocando?
- ¿Quieres que te provoque? - Se inclino hacia él antes de que Alvaro pusiera el motor en marcha.
- Mas tarde...preciosa... - Le dio un suave beso.