Daddy's little boy || GgukJin

III. Día de compras

—Ya no hay jugo... —Seokjin pasa la mirada fugazmente por la nevera enumerando con voz alta los artículos faltantes. —Ni helado, solo hay dos cartones de leche...

Jungkook a su espalda garabatea en una libreta todo lo que el pequeño nombra.

—Compraste helado la semana pasada, Jinnie.

El menor suspira y se cruza de brazos, totalmente enfurruñado frente a la nevera. —Tú preguntaste que hacía falta...

—Bien. —Jungkook besa la cabecita despeinando el cabello rosa en el proceso. —Helado, ¿falta algo más?

—¡Galletas!

—Seokjin... 

[🍡]   

Salir de compras siempre será divertido. El supermercado quedaba algo lejos debido a que la residencia de Jeon estaba en una finca a las afueras de la ciudad eso le permitía viajar en camioneta y conversar en el transcurso sobre como fue el trabajo de Daddy, aunque eso lo hablan todos los días al volver Jungkook del trabajo.

Seokjin realmente disfrutaba de las compras, de hecho, fue él quien pidió a Jungkook que lo hicieran juntos y no enviara a ningún empleado a hacerlo.
Era una forma tranquila de pasar el tiempo juntos y era divertido.

Tirando del carrito, esta él menor y detrás está Jungkook rodeando su cuerpo a la vez que avanzan entre los pasillos.

—Lleva dos de esas. —Jeongguk señala con la mirada dos frascos de mermelada que el pequeño toma entre sus manos, una de fresa y otra de frambuesa. —Muy bien.

Quizás para cualquier persona en el mundo tomar dos frascos de un estante no era cosa de aplaudirse pero Jin realmente disfrutaba de los mimos y besos que recibía después de obedecer a Daddy haciendo bien las cosas.

En las compras, siempre recibía muchos besitos de premio, también por eso disfrutaba hacerlo.

Cuando la lista estuvo completa de todo lo básico, los ojitos oscuros del chico de la sudadera azul (originalmente de Jungkook) se iluminan junto a ese puchero que pone cuando va pedir algo. Sus dedos picotean sin fuerzas el pecho del más alto, quien lo observa hacia abajo con una sonrisa genuina y enternecida.

—Daaaaddy.  —Seokjin alarga las vocales y se balancea sobre sus talones. —¿Podemos comprar malvaviscos?

—No puedes comer tanto dulce, bebé, no quiero que enfermes. —le acaricia la espalda con una mano de arriba a abajo. —Ya tenemos helado, mi amor.

—Por favooooor. —Seokjin insiste abrazando a Daddy muy fuerte. —¡Prometo no comerlo todo de una vez!

Jin sigue abrazando al más alto con fuerza, mientras repite una seguidilla de "por favor" en voz bajita amortiguada por el pecho de Jeon.

Éste extiende un brazo y del estante a su lado, toma una bolsa de malvaviscos que cae en el carrito sin que Seokjin se de cuenta.

—Dame un beso y lo pensaré.

Jin le da muchos besitos, pequeños besitos en los labios que truenan como dulces ácidos sobre la lengua. Se puede escuchar la risa ronca de Jungkook detrás de sus labios mientras el pelirosa sube y baja en las puntas de sus pies.

—¿Más? —Jin se sujeta de los hombros del mayor, jugando a tocar su nariz con la contraria.

—Uno y ya...    

  

      -jeonseokjinniee.  🥀