Daddy [Lucas Wong & Tn]

Capítulo 6: El otro y la otra

—_____~ —escuché la cariñosa voz de Lucas llamándome la atención junto unos suaves besos en mi piel — bella durmiente~ debes levantarte.

—Mngh~ —me quejé tapando mi cabeza con la frazada.

—Vamos — me quita la frazada haciendo que vuelva a quejarme —debes ir al colegio —me clavo en la funda de la cama —te esperaré y pasaremos el resto del día juntos. —nop. No cambiaré de opinión —y estarás libre de tareas —me convenció.

―Me prometes que me haces la tarea ―lo señalé de manera mala.

―Si, está bien ―el sale de mi habitación y me pongo el uniforme.

El me llevó al colegio y nos despedimos con un beso, entré al edificio y entré a mi salón. Estaba esperando tranquilamente al maestro, cuando un chico se acercó a mi.

―Hola _____ ―me sonrió.

―Hola... ¿yo te conozco? ―le pregunté.

―No ―niega con la cabeza ―yo soy nuevo, me cambiaron de aula.

―Oh... Está bien ―asentí.

El se sentó detrás de mi y nos pasamos tooodo el día hablando de cosas realmente irrelevantes, pero nos divertía hacerlo. Si, nos llamaron la atención varias veces y aun así no contuvimos las ganas de reírnos. Al finalizar el colegio, fuimos por helado y pasamos el tiempo en un parque hasta el atardecer.

―Oye, Aaron ―sí, ese era su nombre, Aaron.

―¿Qué pasa? ―me mira.

―¿Notaste que flamable e inflamable significan lo mismo?.

―Espera... ―hace una pausa para pensar ―¡Tienes razón! ¿Cómo el mundo no se dió cuenta antes?.

Dije que eran cosas realmente irrelevantes, pero tenía razón ¿Cómo el mundo no se dió cuenta antes?... Bueno, volviendo a lo importante, me acompañó hasta casa y vi que varios hombres vestidos de negro estaban rodeando la casa de Lucas.

―¡Señor Wong, la encontré! ―uno de ellos me agarró y me alejó de Aaron.

―¡_____! ¿Dónde estabas? ―Lucas salió de la casa y se dirigió a mi ―¿Tu quién eres? ―se dirigió a Aaron intimidándolo ―¿Qué le hiciste a mi chica? ―lo agarró de la camisa.

―¡Lucas, para! ―me solté del hombre de negro ―el me acompañó hasta casa, déjalo, pasé todo el día con él.

―Hoy íbamos a salir ―lo olvidé por completo.

―Lo siento, lo olvidé... ―me disculpé ―bueno, te veré mañana, Aaron ―lo abracé despidiéndome de él.

―Entra ahora, _____ —me dijo serio y no me quedó más que obedecer.

Entré y me senté en el sillón, el estaba enojado y debía quedarme a escucharlo.

—¿Y? —preguntó —¿Quién era ese?.

—Es un amigo. No se porqué te pones así.

—Un amigo por el cual me dejaste plantado.

—Lo olvidé, lo siento —bajé mi cabeza.

—Sólo vete a dormir o haré algo de lo cual nos arrepentiremos los dos —eran las 2 pm. Pero no dije nada y me fui derechito a mi habitación.

Estaba dividida en dos. Primero, estoy algo molesta porque Aaron es sólo un amigo y ¿Aaron y yo juntos? Es como decir que la tierra es plana. Y segundo, él tiene sus razones para molestarse, lo dejé plantado. Pronto, no me hice más problemas, debía hacer mi tarea que Lucas no me hará porque está enojado conmigo, ambos perdimos. Lo sé.
Ya era mi hora de cenar y estaba debatiendo en si salir o no, porque tenía miedo de lo que Lucas iba a hacerme, no tenía ni la menor idea de ello, pero aun así tenía hambre y el apetito le ganaba a mi miedo. Así que sin más me fui al comedor, pero Lucas no estaba ahí, sólo había un plato con mi cena y una nota junto a este.

—Leela, no la ignores como tu tarea —sí, es de Lucas —salí por cuestiones de trabajo, no me esperes despierta, no puedo asegurar a qué hora volveré, sólo sé que será tarde.

No encontré ningún "te quiero" o "cuídate" nada. Bueno tampoco somos pareja así que al menos no me dijo donde estará. Pude cenar tranquila, así que al terminar dejé el plato en el lavabo y subí a mi habitación. Se me hiso difícil dormir sin Lucas, el me abrazaba para dormir y me sentía calentita y cómoda.
       Cuando me desperté, eran las 4 am. Tenía problemas para dormir y quería tomar algo, pronto me autoconvencí de que realmente no podía dormir tranquila sin saber que Lucas está en casa así que lo llamé cientos de veces, ninguna de ellas fue contestada. Me acomodé en el sofá y seguí llamando esperando a que contestara, hasta que pronto escuché voces fuera de la casa, una de ellas la reconocí en segundos, la de Lucas y otra, era de una mujer desconocida, hablaban animadamente y con cariño... No pude evitar sospechar. Lucas entró y ese fue mi momento para saber.

—¿Dónde estuviste? —fue mi primera pregunta.

—Te lo escribí en una nota.

—¿Y quién era esa mujer?.

—Trabajadora de la empresa. Y te dije que no me esperaras despierta.

—No pude dormir sin tí. Y tu sabes eso.

—¿Ah si? —me encara enojado —y tu sabías que íbamos a salir después de tus clases y aún así me dejaste plantado, así que no tienes derecho de reclamarme, vete a tu habitación ahora o lo lamentarás. —hice puños mis manos intentando tragarme la rabia.

Ahora, están "el otro y la otra" y no se que pasará con nosotros.