Escritos Luna Negra.

Querido ser divino.

Escuché muchas veces la frase de "Si Dios está conmigo quién contra mí" que hasta llegué a creer en ella, fue en ese justo momento que lo entendí. Acepte que no puedo esperar que hagas todo sin recibir nada a cambio, no es tan simple que yo esté aquí sentado mientras tú haces lo que te encargo, algo debes ganar, pero no logro entender qué quieres, solo soy un simple ser humano y tú una criatura divina que no me deja nada claro.

Sigo intentando entenderlo, avanzar, pensar y hasta orar por una señal. Sin embargo, no encuentro respuestas, mucho menos atajos y obviamente no le encuentro sentido, nadie puede ser tan bueno o tan malo, de eso nace el Yin y el Yang, el equilibrio perfecto, el mal en el bien y el bien en el mal, como debe ser hasta el final.

Avanzo por el tiempo y no me detengo, estoy en busca de un momento, uno en el que no me haga viejo, en el que nada sea violento, un lugar donde no quiera llorar, no quiera gritar y pueda volar, alejarme de todo esto, eliminar cualquier sufrimiento, pena o remordimiento.

No entiendo que pasa contigo y mucho menos conmigo, quizá alguno de los dos no exista y probablemente sea yo mi amigo, pues tú eres una realidad colectiva y yo un simple individuo, alguien que quiere existir y no ha podido. Mientras tanto tú existes y te escondes de tus hijos. Sé que pagaré por lo que escribo, lo que pienso y lo que digo, pero valdrá la pena mientras sienta que estoy vivo.

Quizá ambos existimos en distintos lugares de este plano llamado realismo, en el que nadie es totalmente bueno, ni totalmente malo, así como muchos amaron otros odiaron y así como él no es tan bueno, yo no soy tan malo, gracias por tanto y a la vez por nada

Querido ser divino...