Cap 17: La amenaza

44 4 0
                                    

Dos días después del encuentro con Jadex aquí estoy. Frente a su casa porque la vida es una y  hay que vivirla al máximo pero con su debida responsabilidad.

Antes de que siquiera pueda tocar el timbre la puerta se abre dejándome ver a nada más y nada menos que Jadex. 

Bueno se adelantaron las cosas... mejor ¿no? jeje

—Em...Hola. 

—¿Qué haces aquí? —pregunta Jadex cruzándose de brazos.

—Necesito hablar contigo.

—Lastima, estoy de salida. 

—Por favor, serán solo unos minutos. —suplico esperando a que me diga que no.

—Bien, pero si te demoras dejare de oírte, me iré y te dejare encerrada en el sótano hasta que vuelva. —musita abriendo por completo la puerta para que pueda entrar.

—Que raro eres. —digo mientras me adentro en su casa. —¿Esta tu hermana?.

—No.

—Bien, porque lo que te tengo que decir no tiene nada que ver con ella. —digo cruzándome de brazos  como hizo él hace un rato.

—Lo sé.

—¿Sabes de lo que te quiero hablar?

—Ujum.

—Bien, entonces esto será breve.

—Eso espero.

—Aléjate de lucero. Sal de su vida y déjala en paz. —digo mientras lo hago retroceder hasta que su espalda choca con la pared.

—No puedo.

—No me importa, harás lo que te estoy diciendo y punto, o si no las vas a pagar muy caro y créeme que yo no hablo por hablar. Lo que digo lo cumplo, pregúntale a Laura, ella sabe muy bien de lo que te estoy hablando. —lo amenazo de una manera tan feroz que si fuera él ya hubiera huido despavorida por el terror.

Por unos segundos no dice nada, solo me mira como si estuviera analizándome. De un momento a otro me garra de los hombros y me da vuelta haciendo que mi espalda choque con la pared pero de una manera no tan fuerte.

—Sé perfectamente lo que sucedió con Laura. Sé que ella no es ninguna santa, pero tampoco merecía el susto que le diste. No sabes absolutamente nada de lo que esta pasando realmente. Solo eres una niñata que juega a ser detective y a buscar cosas donde no las hay. Y sobre Lucero, créeme, yo no quiero estar con ella. No la amo y ella no me ama a mí, pero no tengo elección y ella lo sabe perfectamente. No tienes ni la mas mínima idea de la mierda que te rodea y aún así piensas que lo sabes todo y que puedes ayudar a todos. —suelta una risa seca mientras una de sus manos pasa de estar en mi hombro a estar en mi mejilla — Y para que sepas, Lucero nunca me envió una foto suya intima. Eso debe de darte algún indicio de porque estoy con ella...o tal vez no .En fin, por más que me gustaría sacarte de la burbuja en la que vives para que veas la realidad no puedo. Depende de ti si quieres salir al exterior o si te quieres quedar atrapada en tu mundo para siempre por miedo. Me da igual. 

Se separa de mí y me da una mirada que podría helar al mismísimo infierno y se dirige a la puerta.

—Camina.

—¿Eh?

—Te recuerdo que voy a salir. —dice indicando lo obvio.

—Ah...cierto

Lo sigo y cuando estamos ya fuera de su casa me dice:

—Habla con tu amiga, tal vez se anima a decirte la verdad de una vez por todas.

Iluminaste mi almaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora