13. Una nueva amiga y yo siento...

9 0 0
                                    


el mayor entro con la mochila en sus hombros a la habitación, en el brazo llevaba una bolsa, en cuanto entro fue visto por la chica la cual estaba de rodillas subida en la cama con el cabello hecho rulos y aparecer húmedo, la misma se recostó boca abajo suspirando,. Joel rio al ver como la peli azul estaba. ¿Con el culo pa rriba?

- Que haces?- dijo casi riendo, obteniendo un gruñido como respuesta. Dejo la mochila y la bolsa en el pequeño comedor de la mini cocina.

Se acercó con pasos sigilosos hasta que la chica reacciono por las sospechas del repentino silencio. No le dio tiempo de responder hasta que sintió como su cuerpo era aplastado por el mayor el cual se había lanzado encima suyo sacándole el aire.

Antes de sacar sus palabras insultantes su boca se llenó de risas desesperadas por las manos del castaño, el cual metió sus manos con largos dedos en la cintura de la menor para hacerle cosquillas. Descubrió una de sus debilidades, y la aprovecho para al menos escuchar una carcajada de su parte.

La primera carcajada.

- ¡b-bastaaa! Jajaja ¡sueltaameee! Jajajjajaja!!- pronto su risa se volvió irreconocible y el mayor se detuvo observando a la chica boca abajo respirando entrecortadamente- ¿¡y eso porque!?- llevo su mano a su estómago, le dolió de tanto reír.

- Parecías deprimida- dijo riendo- dicen qu unas risas mañaneras no hacen de mal.

El mayor volvió a recostarse encima de su cuerpo, esta vez de, manera más suave haciendo que sus cuerpos perecieran un sándwich de solo dos panes. Joel podía sentir como la respiración de la chica se relajaba.

- ¿Cómo te sientes?- pregunto- ¿la pastilla funciono?

- Si.... Duelen pero es poco- dijo mientras recostaba el rostro en el colchón recién tendido.

- ¿Por qué estás en esa....posición?- pregunto poniéndose a su lado.

Sheilyn estaba boca abajo con el culo por el aire, una posición bastante divertida.

- Estoy tratando de que el dolor me pase- dijo volteando su cabeza para verlo a los ojos.

Ah, sus ojos...

- Es la primera vez que escucho que el dolor de resaca se iba si hacían de perrito.

- ¿Eres tonto?- dijo la menor- es para el dolor de....-pensó, oh no-...cólicos.

- Ah, la regla ¿no es así?

- S-si....Joel escucha- se sentó en la cama y vio al ojiverde acostado, con los brazos alrededor de su cabeza y las manos debajo del mismo, la miraba atento- gracias por...las toallas, no me imagino que clase de cosas pasaste por comprarlas.- sentía que con cada palabra su rostro se calentaba, y los bellos de sus brazos y piernas se levantaban suavemente- y...¡t-tantas!, y de todo tipo. Con una sola bastaba- Joel sonrió, otra nueva emoción a la lista- y la ropa......que llamaras al servicio de limpieza....todo eso- ya no podía más.

El mayor se sentó a su altura y le acaricio la cabeza, como un gatito, ella se limitó a hacer una expresión triste.

- Se lo que dirás enana- ella levanto la vista – no necesitas agradecerme, yo ayer.....um, creo que fue muy irresponsable dejarte ayer sola en el antro.- ella negó con la cabeza.

- No digas eso, y ¿Cuánto invertiste?

- ¿para que quieres saberlo?

- Te devolveré todo el dinero- poso su mirada al techo- creo que me alcanza.

hacker_girl and mau5_trollWhere stories live. Discover now