VI: Primer patrullaje

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Sukuna

Al terminar de cenar me di un baño, no me pongo ninguna ropa que se caracterice como heroína. Paso por el cuarto de Kenji, noto que esta hablando con la foto de Ren con la puerta media abierta. Me acerco con sigilo, recojo mi cabello dejándolo detrás de mi oreja para escuchar lo que dice.

—Por favor protégela, hermano. Se que el señor Bakugo es un gran héroe, pero no quiero quedarme solo. A padre no le importara si me convierto en héroe, pero a Sukuna sí. — une sus manos pidiendo por mí, suspiro y toco la puerta.

—Me iré, recuerda cepillarte antes de dormir, cerrar las puertas con llave y dormir temprano. — le mando haciendo seña de que lo estoy velando.

—¡Parte traseros! — exclama, sonrió.

—Hace mucho que no hago eso, espero que me salga un villano para demostrarle como era en mis tiempos. — le sigo el juego logrando que ría. —Buenas noches. — me despido.

—Buenas noches. — despide y cierro la puerta para suspirar, me doy en los cachetes dos veces y bajo para enfrentarme a Bakugo.

Me congelo a verlo dormido sobre la mesa, sabia que tenia que ir con el o sino se duerme y pueden hacerle daño. Me acerco, su rostro parece otro sin ese ceño fruncido siempre. Miro su mano y recuerdo como la agarre aceptando su propuesta.

—Katsuki, vámonos. — lo despierto con tan solo subir mi voz, este se levanta todo babeado a lo que aguanto reír.

—Te tardaste demasiado y no te vez como una heroína. — se queja bostezando. —Vamos a mi hogar, te daré unas cosas y prepararme. — se levanta a lo que lo sigo pisando los talones de sus pies.

Minutos después estoy delante de un hogar algo moderno, me imaginaba algo... ¿explosivo? Pero no, se ve tranquila como mi casa en sueño. El hombre de pelo rubio entra y me deja pasar, lo sigo en silencio.

—Espera aquí. — manda a lo que le hago caso.

Esta vacía... solo hay cajas y algunas cosas en la casa. Camino a la cocina, los gabinetes están vacíos y la nevera por igual. Miro que hay un patio para entrenar con una piscina.

—Creo que los héroes no tienen tiempo para sus cosas... — comento observando el patio todo hecho un desastre.

—Estas en todo lo correcto y mas si quieres ser un numero uno. — responde Katsuki detrás de mi ganándose un susto de mi parte.

—¡Ah! — grito, hago monerías de karate logrando que me mire raro.

—Dime que si sabes luchar o me arrepentiré ahora de llevarte conmigo. No quiero un mediocre a mi lado. — comenta, lo miro mal y noto que tiene ropa en sus manos.

—Claro que se luchar, pateaba traseros en mis tiempos. — respondo sin alejar mis ojos de la ropa, me paro de puntas para ver mejor.

—Eso lo decidiré yo hoy, espero que no seas un estorbo o sino te matare. — contesta, hago pose de soldado.

—¡Entiendo señor, no lo defraudare! — alejo mi mano de la frente, suspira y me da la ropa.

—Es mi uniforme de cuando estudiaba a la UA, apuesto que te sirve. Era mas delgado y pequeño para aquel entonces. — explica caminando, dejándome sola. —Hay un baño en el pasillo. — informa desde el segundo piso.

My #1 hero: Katsuki BakugoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora